¿Qué son los animales silvestres?
Los animales silvestres son aquellas especies que no están domesticadas, ni educadas para vivir con humanos. Viven de manera salvaje en la naturaleza, habitando cualquiera de los ecosistemas de la Tierra. Sin embargo, los efectos de la humanidad sobre el mundo afectan sus medios, hábitats y modos de vida de manera directa.
Los animales silvestres tienen un modo de vida, con comportamientos y alimentación, muy diferentes a sus pares domesticados. Están acostumbrados a cumplir con su ciclo vital movidos por su instinto de supervivencia, sin ayuda externa y expuestos a grandes amenazas.
El adjetivo silvestre, en el caso de los animales, se usa para diferenciar a las especies no domesticadas. En la actualidad, el impacto ambiental y el tráfico de ejemplares ponen en peligro a estos animales. Muchos se vieron afectados por los cambios en su hábitat, lo que provocó la extinción de muchas clases o su migración a otros espacios donde encontraron refugio.
Hay animales silvestres de todas las familias y en todos los ecosistemas: selva, bosque, sabana, campos o desierto. Los hay herbívoros, carnívoros y omnívoros, cazadores y depredadores o en peligro de extinción.
Características de los animales silvestres
- Adaptados a ambientes naturales: están adaptados para vivir en entornos naturales sin la intervención del hombre. Sus comportamientos y características físicas están moldeados por las condiciones de su hábitat.
- Diversidad de especies: la vida silvestre incluye una increíble diversidad de especies, desde mamíferos y aves hasta reptiles, anfibios, peces e invertebrados, cada uno con características únicas y adaptaciones específicas.
- Reproducción y ciclo de vida naturales: los animales silvestres generalmente siguen ciclos de reproducción y desarrollo determinados por factores ambientales, como las estaciones, y no están sujetos a control humano.
- Instintos de supervivencia desarrollados: poseen instintos agudos para encontrar alimento, refugio, y evitar depredadores. Estos instintos son cruciales para su supervivencia en un entorno a menudo desafiante.
- Roles ecológicos específicos: cada animal silvestre desempeña un papel en su ecosistema, ya sea como depredador, presa, polinizador o de alguna otra manera, contribuyendo al equilibrio y la diversidad del ecosistema.
- Vulnerabilidad a la alteración humana: son vulnerables a las alteraciones en su hábitat causadas por la actividad humana, como la deforestación, la contaminación y el cambio climático.
- Importancia para la conservación: la conservación de la vida silvestre es fundamental para mantener la biodiversidad, la salud de los ecosistemas y, en última instancia, el bienestar humano, que depende de los servicios ecológicos que estos animales ayudan a proporcionar.
Ejemplos de animales silvestres
1. Canguro
Perteneciente a la subfamilia Macropodinae, este simpáticoe animal es originario de las praderas australianas. Entre sus particularidades, cuenta con la capacidad de saltar y de llevar a sus crías en una especie de bolsa natural en el abdomen.
Los canguros son herbívoros y nocturnos, por lo que pasan gran parte del día quietos, alimentándose. Viven en grupos y poseen una cola larga y musculosa que les permite mantener el equilibrio.
2. Guacamayo
Esta familia de aves del tipo de los loros está conformada por 14 especies que habitan en la selva, todas ellas con un colorido plumaje. Principalmente, se encuentran en Latinoamérica, en la larga extensión de territorio que existe entre México y el norte de Argentina.
Las cualidades de los guacamayos varían según su especie, pero todos comparten el hecho de vivir en los árboles y alimentarse de insectos y de frutos, como la baya.
3. Rinoceronte
Es de gran tamaño y su nombre significa en latín “nariz cornuda”. Los rinocerontes tienen una destacada capacidad de adaptación y pueden vivir en diversos ecosistemas, desde las sabanas hasta los bosques, en climas tropicales o subtropicales.
Hay cinco especies de rinocerontes registradas. Todas ellas comparten su alimentación herbívora, una piel gruesa y resistente, un agudo sentido del olfato y del oído, y una vista limitada.
4. Koala
Estos marsupiales son los únicos sobrevivientes de la familia Phascolarctidae y llevan una vida sedentaria, en la que pueden dormir hasta 20 horas por día.
Viven en los bosques, habitan en los árboles de eucaliptos y se alimentan mayormente de sus hojas. Los koalas tienen un cuerpo robusto con pelaje gris y suelen encontrarse en la región sur y este de Australia.
5. Orca
Estos gigantescos y ágiles animales acuáticos son una de las especies más grandes de su tipo. Tienen una aleta dorsal que puede medir hasta 1,8 metros, y un cuerpo que puede alcanzar los 9 metros de largo y las nueve toneladas de peso.
Su cuerpo, negro con manchas blancas, se hizo famoso por estar presente en algunos acuarios y películas. Las orcas no son un animal doméstico, por el contrario, son bestias silvestres con una combinación de fuerza, velocidad e inteligencia que las convierte en depredadoras muy versátiles.
6. Pelícanos
Existen ocho especies de estas aves blancas con picos amarillos. Viven y viajan en bandadas, se reproducen en colonias y cazan de manera cooperativa.
Pueden habitar en diferentes ecosistemas, desde zonas intertropicales a lugares templados. Se les puede ver en selvas, bosques y praderas, pero no pueden habitar en regiones polares ni en el océano abierto.
7. Búfalo
Este mamífero de gran tamaño es conocido también como bisonte americano. Vive en las planicies de Norteamérica, desde el norte de México hasta Canadá, pasando por toda la extensión de Estados Unidos. Viven en manadas y llegan a medir hasta 1,8 metros de alto y 3 metros de largo. Pueden pesar más de una tonelada.
8. Rana toro
Habitante de lagos y pantanos, esta especie de anfibio anuro tiene la particularidad de pesar casi un kilo y presentar un color que varía de marrón café a diferentes tonos de verde.
A diferencia de otras especies de esta familia, las ranas toro pueden alimentarse de pequeños organismo vertebrados.
9. Pingüino
Estas aves marinas no voladoras habitan en el hemisferio sur del planeta y tienen la capacidad de poder bucear gracias a sus alas.
Viven en grandes colonias que se desplazan de acuerdo a las estaciones del año. Se alimentan fundamentalmente de peces y los machos son los responsables de cuidar los huevos con las crías.
10. Jirafa
Este mamífero, originario de las sabanas y los bosques africanos, es el animal más alto de la Tierra. Tiene una estatura que puede alcanzar los seis metros, con un cuello de dos metros de largo.
Las jirafas tienen agilidad para escapar del peligro, se alimentan de los frutos de los árboles altos pero no se ha registrado que emitan sonidos. La ciencia no pudo determinar si no los producen o si ocurren en una frecuencia muy baja para el oído humano.
11. Gato montés sudamericano
Es el felino salvaje más común de América del Sur y habita diferentes ecosistemas de este extenso territorio. Se alimenta, fundamentalmente, de carne de otros organismos.
Estos gatos son animales solitarios, similares a los gatos domésticos pero con actitudes salvajes. Poseen un gran sentido de la vista y son ágiles cazadores nocturnos.
12. Jabalí
Este mamífero puebla diferentes ecosistemas de África, América o Asia y está considerado como uno de los animales invasores más dañinos del planeta.
Los jabalíes son omnívoros, se alimentan de carne y vegetales y pueden pesar hasta 90 kilos. Tienen un gran sentido del olfato que les permite detectar alimentos a 100 metros, pero tienen muy mala vista.
13. Hipopótamo enano
Estos mamíferos, solitarios y nocturnos, viven en bosques y marismas de África Occidental. Son más pequeños que los hipopótamos comunes, se adaptan fácilmente al ecosistema terrestre pero también necesitan del agua para vivir.
Salen de su letargo en el agua durante la tarde para alimentarse, tarea en la que pueden invertir hasta seis horas por día. Una de las particularidades que presentan es su capacidad para aprovechar los caminos abiertos por otras especies para desplazarse.
14. Gorila
Estos mamíferos, que se desplazan en cuatro patas, comparten el 97% de su ADN con el de los seres humanos. Pueden medir 1,8 metros, pesar 200 kilos y están divididos en subespecies, de acuerdo a su distribución geográfica en África: oriental u occidental.
Por sus similitudes genéticas con los humanos, poseen una gran inteligencia y pueden decodificar algunos lenguajes de signos. Los gorilas se encuentran en peligro de extinción por la acción de los cazadores furtivos y la destrucción de su hábitat natural.
15. Oso polar
El oso polar es el único súper depredador que vive en el Ártico. También es el animal carnívoro terrestre más grande del planeta.
Necesitan de las bajas temperaturas para sobrevivir, por lo que habitan en zonas polares del hemisferio norte. Presentan patas muy desarrolladas tanto para andar sobre el hielo como para nadar.
Su cuerpo tiene un pelaje de color claro, orejas y cola muy reducida, para mantener el calor corporal y no sufrir el frío. Se alimentan de la carne de otras especies, especialmente de crías de focas.
Las hembras hibernan durante el período de gestación, pero los machos no necesitan hacerlo. Esta especie corre riesgo de extinción por el derretimiento de los hielos a causa del cambio climático.
16. Zorro
Conocidos también como vulpinos, comprenden 27 especies diferentes que habitan en diversos ecosistemas y hábitats de la Tierra. En algunos lugares del mundo son considerados una plaga.
Se les considera carnívoros oportunistas, pues se alimentan de otros organismos que encuentran en las cercanías de su lugar de vida.
17. Alce
Estos animales herbívoros se caracterizan por reproducirse durante los meses de septiembre y octubre. Si bien pueden adaptarse a diferentes ecosistemas y climas, su área de distribución se fue reduciendo por la caza indiscriminada.
Actualmente, viven mayormente en pequeños grupos de 10 o 15 ejemplares en bosques nórdicos de Europa y Asia, aunque también quedan algunas familias en América. Son animales solitarios. Los machos cuentan con grandes astas que caen en invierno y les crecen en primavera, con formas diferentes en cada ejemplar.
Las astas les sirven para diferenciarse según el género y para defenderse del ataque de otros animales o ejemplares.
18. Tapir
Habitantes de las zonas de bosques de Latinoamérica y el sudeste asiático, son herbívoros de gran tamaño con una historia de 55 millones de años sobre la Tierra.
Los tapires son animales primitivos, dóciles y tranquilos, que tienen una trompa versátil, ideal para alimentarse de frutos, hojas y plantas. Suelen realizar sus actividades durante la noche.
Se encuentran en peligro de extinción, en especial en el territorio de México, por la caza indiscriminada, el bajo potencial reproductivo y la destrucción de su hábitat.
19. Saltamontes rosa
Los saltamontes rosas corresponden a una subespecie de los saltamontes. Según la ciencia, uno de cada 500 saltamontes nace de color rosado, mientras el resto son verdes, marrones o blancos. Está en peligro, ya que los tonos de su cuerpo son un atractivo extra para los depredadores.
20. Ligre
El ligre es uno de los animales más particulares de la Tierra, pues es un cruce entre el león macho y el tigre hembra, que puede alcanzar los cuatro metros de largo.
A pesar de su tamaño grande y voluminoso, esta especie tiene el problema de que los machos son estériles, por lo que su supervivencia depende del cruce de otras especies.
Son animales carnívoros. Su existencia fue comprobada en Rusia. Actualmente no hay registros de ejemplares en estado silvestre.
21. Zorro de Fénec
Este exótico animal del desierto del Sáhara es uno de los más pequeños de este tipo de familia y uno de los más bellos. El zorro de Fénec cuenta con unas particulares orejas que le sirven de ventilación. Es una de las presas favoritas de los depredadores. Realiza la mayor parte de su ciclo vital durante las horas nocturnas, se alimenta de insectos, reptiles, roedores, aves y sus huevos.
Además, estos zorros poseen un gran sentido de la audición, tan desarrollado que les permite escuchar el ruido de sus presas incluso cuando están dentro de sus madrigueras.
22. Slow Loris
También conocido como mono lento, este tipo de primate perezoso habita en Asia y tiene una misteriosa historia evolutiva de la cual no se tiene ningún registro cierto.
Es una especie en riesgo de extinción, no solo por las actitudes humanas o climáticas, sino porque no posee ningún tipo de protección contra sus depredadores. Su única arma de defensa es una glándula que lanza veneno desde las axilas.
Existe una prohibición a nivel mundial que impide tener un loris como mascota o con algún fin doméstico.