La ciberadicción es una patología que se caracteriza por un uso obsesivo y adictivo de las nuevas tecnologías durante el día a día de la persona. Generalmente está relacionado con el uso de Internet, pero también puede tener que ver con otros elementos como los videojuegos o las redes sociales.
Las personas que sufren ciberadicción emplean la tecnología de manera constante, y se centran en ella durante su tiempo libre de tal manera que el resto de actividades de su vida cotidiana se ven relegadas a un segundo plano. Por ejemplo, un individuo afectado por este problema se pasaría todo el día revisando las mismas aplicaciones una y otra vez, en un intento por entretenerse y conseguir algo de estimulación.
Al tratarse de una adicción, los síntomas y las consecuencias son muy similares a los de otras patologías de esta categoría. Así, las personas afectadas por la ciberadicción suelen sufrir grandes dosis de ansiedad y otras emociones negativas. Además, su capacidad para recibir placer de otras fuentes disminuye en gran medida, de tal manera que dependen cada vez más de la tecnología para sentirse bien.
La ciberadicción existe desde hace varias décadas, pero ha alcanzado unos niveles de prevalencia realmente elevados con la aparición de los teléfonos inteligentes. Debido a que los llevamos con nosotros continuamente y a la estimulación que ofrecen, cada vez más personas están sufriendo síntomas de esta patología.
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Síntomas de la ciberadicción
Al igual que ocurre en el caso de muchas otras patologías psicológicas, los síntomas de la ciberadicción suelen clasificarse en tres tipos diferentes: cognitivos, emocionales y de comportamiento. Para tratar de comprender mejor esta enfermedad, es necesario estudiar los más importantes dentro de cada una de estas categorías.
Síntomas cognitivos
En la mayoría de los casos de ciberadicción, el primer síntoma que se puede notar es una gran dificultad para concentrarse en una sola tarea. La persona siente la necesidad compulsiva de pasar de una actividad a otra constantemente, y tiene grandes problemas para mantener un solo hilo de pensamiento o para centrarse en un tema en concreto durante periodos largos de tiempo.
Por otro lado, es muy común que las personas con ciberadicción manifiesten sentir una especie de “niebla mental”: la sensación de que sus pensamientos van más lentos de lo que normalmente lo hacen, unida a una gran fatiga psicológica y la necesidad de descansar mucho más de lo habitual.
Además de esto, generalmente las personas con esta patología pierden el interés por aquellas actividades y pasatiempos que anteriormente les llamaban la atención. Si no se trata el problema, todos los síntomas cognitivos se van retroalimentando y el individuo se va volviendo cada vez más dependiente de Internet para entretenerse y para pasar el rato.
Síntomas emocionales
Los síntomas emocionales son probablemente los que muestran más claramente que esta patología es realmente una adicción, similar a la que se produce con el juego o con sustancias adictivas como las drogas.
Las personas con ciberadicción sienten que “necesitan” estar constantemente comprobando su ordenador o teléfono móvil, y experimentan un gran sufrimiento si no pueden hacerlo.
Normalmente, este sufrimiento se manifiesta en forma de ansiedad, una sensación extremadamente desagradable que solo disminuye en cierta medida cuando la persona puede comprobar su móvil, su correo o el objeto concreto de su adicción. Con el tiempo, su tolerancia a la ansiedad se va haciendo cada vez más baja y por lo tanto la adicción tiende a agravarse a largo plazo si no se interviene de alguna manera.
Además de esto, las personas que sufren de ciberadicción suelen experimentar una reducción de sus emociones en mayor o menor medida. Esto, que se conoce como anhedonia, implica que su única fuente de disfrute es pasar tiempo conectados a Internet, descuidando así el resto de áreas de su vida.
Síntomas conductuales
La forma de comportarse de las personas con ciberadicción es claramente compulsiva. A menudo sin darse cuenta de lo que hacen, se pasan la mayor parte del tiempo comprobando una y otra vez sus notificaciones, adictos a un videojuego o posteando en redes sociales, depende de cuál sea la variante que sufran.
El resto de actividades cotidianas de estos individuos son generalmente abandonadas en favor de la adicción a la tecnología, lo que puede traer complicaciones muy severas a medio y largo plazo.
Tipos de ciberadicción
No existe una única clasificación oficial que recoja cuáles son todos los tipos de ciberadicción que existen. Sin embargo, algunos autores han tratado de dividir el problema en varios grupos en función de cuál sea el tipo de tecnología que causa los síntomas. A continuación veremos una de las clasificaciones más comunes para esta patología.
– Adicción al cibersexo
La adicción al cibersexo es una de las más sencillas de entender simplemente con su nombre. Implica la necesidad compulsiva de visitar páginas de pornografía, chats para adultos, sitios de webcams eróticas y portales de este estilo. Además de los síntomas ya descritos anteriormente, este tipo de ciberadicción puede dificultar el disfrute del sexo en la vida real.
– Compulsiones en red
Este tipo de ciberadicción abarca varios comportamientos que pueden llevar a la persona a perder dinero real si no consigue controlarlos. Entre ellos se incluyen las compras compulsivas por internet, la participación en casinos virtuales y la adicción por las subastas online.
– Adicción a las relaciones virtuales
Uno de los tipos de ciberadicción más comunes es el que implica la necesidad de buscar atención de otras personas a través de Internet. Dentro de esta categoría podríamos encontrar la obsesión por las redes sociales, por las aplicaciones o webs de citas, o incluso por servicios tan aparentemente inocuos como el correo electrónico.
– Búsqueda compulsiva de información
Internet nos abre las puertas a adquirir todo el conocimiento disponible en el mundo. Algunas personas, sin embargo, se vuelven adictas al proceso de buscar nueva información y pasan gran parte de su día navegando por Internet mirando datos inconexos. Aunque esta forma de ciberadicción es la más difícil de reconocer, no por ello es menos dañina que las otras.
– Adicción a los videojuegos
Aunque algunos expertos no la incluyen en la misma categoría que las de los otros tipos, la adicción a los videojuegos es una de las patologías más comunes entre las personas más jóvenes del mundo desarrollado, y también una de las que más problemas psicológicos y sociales causan hoy en día.
Causas
No existe una única causa que provoque la ciberadicción en todos los casos. Por el contrario, normalmente se dan una serie de factores que pueden hacer mucho más probable el desarrollo de esta patología en las personas que los sufren.
Uno de los motivos por los que la ciberadicción se está volviendo cada vez más común es la presencia de la tecnología en todos los ámbitos de nuestra vida. Las personas estamos cada vez más conectadas y pendientes del móvil en todo momento, por lo que cada vez es más frecuente que acabemos desarrollando una adicción a este elemento.
Por otra parte, la tecnología en sí tiene un efecto muy potente sobre el circuito de la recompensa de nuestro cerebro. Los estudios de neuroimagen muestran que cuando recibimos una notificación, recibimos una descarga de dopamina, el neurotransmisor encargado de producirnos placer. Con el tiempo, nos volvemos más y más dependientes de estas notificaciones para sentirnos bien.
Además de esto, hoy en día las personas que no están conectadas constantemente pueden sentirse desplazadas, ya que gran parte de la comunicación que se produce en nuestro día a día se da en un medio online. Juntando todos estos factores, no es de extrañar que la ciberadicción sea uno de los problemas más frecuentes en los países desarrollados.
Consecuencias
A pesar de que la adicción a la tecnología sea tan frecuente a día de hoy, esto no implica que sea menos dañina. Por el contrario, diversos estudios al respecto han mostrado que puede provocar efectos tan perjudiciales como otras adicciones percibidas como más severas, como la relacionada con el juego o con las drogas.
Así, las personas con ciberadicción suelen tener problemas emocionales muy graves, incluyendo episodios de ansiedad o depresión. Por otro lado, normalmente les cuesta mantener un equilibrio en sus vidas, lo que puede llevarles a la pérdida de su empleo y al deterioro de sus relaciones sociales.
En algunos de los tipos de ciberadicicón más comunes, además, la persona puede llegar a perder todo su dinero (compulsiones en red) o la capacidad de relacionarse con los demás en la vida real de forma satisfactoria (adicción al cibersexo y a las relaciones virtuales).
Prevención
A pesar de que es posible tratar la ciberadicción una vez que se ha producido, generalmente es mucho más interesante tratar de prevenir su desarrollo. Para ello, hay dos factores fundamentales que es necesario trabajar en todo momento: la creación de hábitos saludables, y el desarrollo de una red social adecuada.
Entre los hábitos saludables más importantes en la prevención de la adicción a la tecnología encontramos el ejercicio, la participación en aficiones que no estén relacionadas con Internet, y el planteamiento y persecución de metas personales.
Por otro lado, contar con una red social adecuada impedirá en gran medida que la persona se haga dependiente de la tecnología para sentir placer, ya que las interacciones sociales son también una fuente de dopamina muy importante.
Referencias
- “What is internet addiction?” en: Addiction Recovery. Recuperado en: 27 Enero 2020 de Addiction Recovery: addictionrecov.org.
- “What is cyber addiction?” en: Online Sense. Recuperado en: 27 Enero 2020 de Online Sense: onlinesense.org.
- “What is internet addiction?” en: Addiction Center. Recuperado en: 27 Enero 2020 de Addiction Center: addictioncenter.com.
- “Internet addiction disorder” en: Psycom. Recuperado en: 27 Enero 2020 de Psycom: psycom.net.
- “Internet addiction” en: Wikipedia. Recuperado en: 27 Enero 2020 de Wikipedia: en.wikipedia.org.