Entre las corrientes epistemológicas más importantes destacan el escepticismo, el dogmatismo, el racionalismo, el relativismo o el empirismo. La epistemología es la rama de la filosofía encargada de estudiar el conocimiento como fenómeno. A partir de esa disciplina se generan teorías como el origen del conocimiento, su significado y su relación con el sujeto.
Algunas de las preguntas claves planteadas por esta disciplina podrían ser: ¿Qué es el conocimiento? ¿Qué significa saber algo? ¿Cuál es la diferencia entre creer y saber? ¿Cómo podemos llegar a saber algo?, y ¿Cuáles son las bases para el conocimiento real?
Estas preguntas ilustran el propósito de la epistemología, que pretende investigar las diferentes circunstancias históricas, sociológicas y psicológicas en las que se produce el conocimiento. En este sentido, la epistemología ha tenido un impacto considerable en el mundo científico y académico a partir del intento de definición de los límites y posibilidades de creación y producción de nuevos conocimientos.
Esto ha llevado al surgimiento de diversas escuelas o corrientes epistemológicas (paradigmas), que dieran cuenta de las distintas formas de producir el conocimiento o de abordarlo.
Asimismo, estos paradigmas han sido aplicados a disciplinas como lógica matemática, estadística, lingüística y otras áreas académicas. Como en muchas otras disciplinas filosóficas, las teorías y discusiones sobre este tema han estado presentes por cientos de años.
Sin embargo, no ha sido hasta la época moderna donde estos planteamientos han calado fuertemente y suscitado preocupaciones que han dado lugar a nuevas propuestas como métodos y estructuras del conocimiento.
La premisa base sobre el conocimiento es que proviene de la coincidencia de una creencia con “la realidad”. Sin embargo, partiendo de este punto existen muchas variaciones y cuestionamientos al respecto.
La epistemología pretende responder a un gran abanico de preguntas y determinar, entre otras cosas, aquello que podemos saber (los hechos), la diferencia entre creer y saber y qué es saber algo.
Basándose en esto, se han formulado distintos paradigmas para abordar cada una de esas áreas, partiendo desde lo más básico, la aproximación del sujeto al objeto de conocimiento.
Corrientes epistemológicas principales
Fenomenología del conocimiento
Esta corriente se propone describir el proceso mediante el cual llegamos a conocer, entendiendo conocer como la forma en que un sujeto aprehende un objeto.
Sin embargo, a diferencia de otros planteamientos epistemológicos, la fenomenología del conocimiento se preocupa únicamente en describir el proceso con el que nos acercamos a un objeto, sin establecer postulados en cuanto a las maneras de adquirirlo y de interpretarlo.
Escepticismo
Es el cuestionamiento de que el humano sea capaz de acceder al conocimiento. Partiendo de allí, se han desarrollado distintos escenarios para ejemplificar y retar nuestra concepción de realidad, como la teoría del sueño.
Por ejemplo, se sugiere la posibilidad de que todo lo que vivimos sea realmente en sueño, en cuyo caso “la realidad” no sería más que una invención de nuestro cerebro, o de nuestra percepción.
Uno de los más importantes cuestionamientos que giran alrededor de la epistemología es la posibilidad de conocer. Si bien es cierto que “saber algo” proviene de la coincidencia de una proposición con una realidad, es el término “realidad” el que crea un conflicto en esta definición. ¿Es posible realmente saber algo? Es de allí de donde derivan teorías como esta.
El escepticismo en su más sencilla definición podría dividirse en dos corrientes:
- Escepticismo académico, que alega que el conocimiento es imposible, ya que nuestras impresiones pueden ser falsas y nuestros sentidos engañosos, y al ser estas las “bases” de nuestro conocimiento del mundo, no podremos nunca saber qué es real.
- El escepticismo periano, que alega que, por esa misma razón, no hay manera de definir si podemos o no conocer el mundo: se mantiene abierto a todas las posibilidades.
Solipsismo
El solipsismo es la idea filosófica de que solo es seguro que la propia mente exista. Como posición epistemológica, el solipsismo sostiene que el conocimiento de cualquier cosa fuera de la propia mente es incognoscible, es decir, el mundo externo y otras mentes no pueden conocerse y pueden no existir fuera de la propia mente.
Constructivismo
El constructivismo epistemológico es una perspectiva surgida a mediados del siglo XX, que considera que la realidad es una construcción, en cierta manera se podría decir inventada, de quien observa. Eso significa que todo cuanto se aprende se ordena en un marco mental o teórico, y no se podrá “saber” exactamente qué es una cosa como tal, puesto que la realidad y lo que vemos es una construcción que hacemos de ella, basándonos en nuestra percepción humana y la experiencia social.
Por lo tanto, nuestro conocimiento no necesariamente refleja realidades externas o “trascendentes”.
Dogmatismo
Es una postura completamente opuesta al escepticismo, que no solo asume que existe una realidad que podemos conocer, sino que esta es absoluta y tal cual como se presenta al sujeto.
Poca gente se aventura a defender estos dos extremos, pero entre ellos se encuentra un espectro de teorías con tendencias hacia una y otra.
Es a partir de esta diatriba que el filósofo René Descartes (1596-1650) propuso dos tipos de pensamiento, unos claros y comprobables y otros abstractos e imposibles de comprobar.
Racionalismo
La hipótesis de Descartes estaba íntimamente ligada a la rama de la epistemología conocida como racionalismo, cuyos postulados ubican a la razón por encima de la experiencia y a las ideas como el objeto más cercano a la verdad.
Para los racionalistas, la mente racional es la fuente de nuevo conocimiento, a través de nuestra mente y de la reflexión podemos alcanzar la verdad.
No obstante, otros filósofos respondieron a esta teoría con el postulado de que solo pensar no es suficiente y que los pensamientos no necesariamente correspondían con el mundo material.
Relativismo
Según el relativismo, no hay una verdad objetiva universal, más bien cada punto de vista tiene su propia verdad. El relativismo es la idea de que los puntos de vista son relativos a las diferencias en percepción y consideración, por lo tanto, el conocimiento es subjetivo e incompleto.
El relativismo moral abarca las diferencias en los juicios morales entre personas y culturas. El relativismo de la verdad es la doctrina de que no hay verdades absolutas, es decir, que la verdad es siempre relativa a un marco de referencia particular, como un idioma o una cultura (relativismo cultural).
El relativismo descriptivo, como su nombre lo indica, busca describir las diferencias entre culturas y personas, mientras que el relativismo normativo evalúa la moralidad o veracidad de las opiniones dentro de un marco dado.
Empirismo
Esta teoría se basa en los sentidos como fuente del conocimiento. El conocimiento real se forma a partir de aquello que podemos percibir y experimentar. Es nuestra experiencia interna (reflexión) y externa (sensaciones) las que nos permite formar nuestros conocimientos y nuestro criterio.
Por este motivo, el empirismo niega la existencia de una verdad absoluta, ya que cada experiencia es personal y subjetiva.
John Locke (1632-1704), por ejemplo, creía que para poder distinguir si nuestros sentidos estaban percibiendo la realidad debíamos diferenciar entre cualidades primarias y secundarias.
Las primeras son aquellas que poseen el objeto material, las características físicas “objetivas”, y las secundarias, no consideradas reales, son aquellas que dependen de nuestra percepción más subjetiva, como los sabores, colores, olores, etc.
Otros filósofos, como George Berkely (1685-1753), aseguraban que incluso las características primarias eran subjetivas y que todo son solo percepciones.
Realismo
El realismo afirma que el conocimiento se encuentra en las mismas cosas, que siempre son reales, independientemente del sujeto cognoscente.
Teoría JTB
Si creer en algo no lo hace real, ¿cómo podemos definir si sabemos algo? Más recientemente, el filósofo Edmund Gettier (1927-2021) propuso la teoría JTB, llamada también “problema de Gettier”.
En ella se plantea que un sujeto sabe una proposición si: es cierta (lo que se sabe es un hecho real), cree en ella (no hay duda con respecto a la verdad) y está justificada (hay buenas razones para creer que es cierta), y, sin embargo, puede no haber conocimiento, con lo que mostró que una creencia verdadera justificada puede fallar en constituirse en conocimiento.
De hecho, esta teoría es el principal combustible de la gnoseología contemporánea, el estudio de la obtención del conocimiento en general.
Epistemología genética
Fue propuesta por Jean Piaget (1896-1980) y establece que tanto el conocimiento como la inteligencia humana son productos adaptativos del organismo a su entorno. Piaget partió del empirismo y del apriorismo: el conocimiento no es innato (apriorismo) y tampoco se logra solamente mediante la observación y la experiencia (empirismo), sino a la interacción del individuo con el medio.
Epistemología jurídica
Es una rama de la filosofía del derecho, que estudia los procedimientos mentales de que se valen los juristas para identificar, interpretar y aplicar las normas jurídicas. Esta corriente ve al ser humano como un ser único que se manifiesta en distintas maneras de actuar, pensar y reaccionar, por lo que la ley puede tener varias interpretaciones.
Referencias
- Dancy, J. An Introduction to Contemporary Epistemology. Blackwell.
- García, R. El conocimiento en construcción. Gedisa Editorial.
- Santos, B. d. Una epistemología del Sur. Clacso Ediciones.