¿Qué son las dorsales oceánicas?
Las dorsales oceánicas son elevaciones submarinas correspondientes al sistema de cadenas montañosas bajo los océanos que dibujan los límites de las diferentes placas tectónicas que conforman nuestro planeta.
A diferencia de lo que se pudiera pensar (y con base en la teoría más popular), estas formaciones montañosas no se generan por el choque de las placas. Por el contrario, se generan por el material volcánico que constantemente es expulsado por múltiples fisuras en la extensión de la cadena como efecto de la separación de las placas tectónicas.
La actividad volcánica en las dorsales oceánicas es intensa. Es tal el nivel de expulsión de lava a la superficie que estas formaciones pueden medir entre 2.000 y 3.000 m. Es una altura considerable si tomamos en cuenta que es solo lava apilada a gran profundidad y que el pico más alto sobre el nivel del mar, el Everest, tiene poco más de 8.800 m.
De la identificación del grosor de los sedimentos de estas extensas cordilleras submarinas —que en conjunto llegan a extenderse unos 60.000 km—, nace la teoría que afirma que los continentes surgen de acumulaciones progresivas y constantes de material que emergió de estas cadenas y que con el paso del tiempo se fue plegando, enfriando y consolidando.
Un dato interesante y curioso es el arrojado por el estudio de ciertos minerales contenidos en los flujos magmáticos emanados de esas dorsales, que se alinean de formas precisas según su ubicación en el planeta.
Esto hizo a los científicos embarcarse en el estudio de las fuerzas que determinan dicho fenómeno, descubriendo así el electromagnetismo del planeta, único fenómeno que lograría explicar la pregunta inicial.
Características de las dorsales oceánicas
- Al igual que cualquier sistema de montañas en la superficie terrestre, en su desarrollo por todo el planeta, las dorsales oceánicas han generado una topografía que varía entre los 2.000 y los 3.000 m.
- Cuentan con un perfil realmente accidentado, con profundos valles, laderas y protuberancias que, eventualmente, pueden llegar a la superficie para crear nuevas islas volcánicas o un conjunto de estas.
- La característica más notoria es una gran franja hundida que la corona en toda su longitud. Esta hendidura se conoce como rift. El rift es una especie de “costura” terrestre en permanente actividad volcánica, el sitio responsable de que la lava del centro del planeta llegue a la corteza superior y poco a poco se acumule, estabilice y enfríe.
- La actividad volcánica en las dorsales se manifiesta de distintas formas. Si bien los rifts son esa franja en imparable actividad, no son los sitios de actividad más violenta.
- Fumarolas y volcanes subacuáticos se diseminan por miles a lo largo de los 60.000 km de dorsales que recorren nuestro mundo. Los minerales, que participan en ese intercambio, son los que sostienen la vida en su forma más básica.
- El material que conforma los continentes es de data muy superior al encontrado en las laderas de las dorsales. A su vez, el material que se ha estudiado al centro de las dorsales es más nuevo en comparación con el estudiado en los laterales externos.
- Todo ello indica que el suelo oceánico está en constante renovación, propiciada por el continuo fluir de material magmático que se acumula y se desplaza con el paso del tiempo, consiguiendo crear masas enteras de suelo sobre el nivel del mar de gran riqueza mineral.
¿Cómo se forman?
Existe un par de teorías que intentan explicar la aparición de estas cordilleras submarinas. Durante años, geólogos de todas partes del mundo han debatido sobre los procesos que las placas tectónicas deben sufrir para crear las dorsales, o sobre qué procesos desencadenan estas dorsales para hacer que las placas tectónicas se muevan como en efecto lo hacen.
El primer argumento indica que el fenómeno de subducción es el generador de las dorsales. Esta teoría explica que, en su indetenible avance, las placas tectónicas muchas veces encuentran a su paso otras, de menos densidad y peso. En este encuentro la placa más densa logra deslizarse bajo la de menos densidad.
En su avance, la placa más densa arrastra por su peso a la otra, quebrándola y permitiendo que material volcánico salga del borde de fricción. Así aparece el rift, y con este surgen también las emisiones de lava y basalto.
La siguiente teoría defiende la creación de las dorsales oceánicas con el proceso inverso, que no es otro que el de separación de las placas tectónicas.
Este proceso crea un área donde la corteza terrestre sufre una protuberancia debido a que el material en esta deja de ser firme (por la propia separación de las placas). Esta área tiende a quebrarse, dando paso al rift y a la actividad eruptiva característica de la zona.
Diferencia con fosa oceánica
Por definición, una fosa es un área cóncava que puede ser generada por la acción de diversos factores. En este caso en particular, la fosa oceánica tiene su origen en un proceso de subducción de las placas tectónicas, es decir, cuando dos placas tectónicas colisionan, interactúan entre sí y la de mayor densidad se desliza bajo la primera.
Este proceso de subducción de placas va generando a su paso áreas de diferentes profundidades y relieves, siendo las más profundas auténticas fosas submarinas que, como la de Las Marianas, pueden llegar a alcanzar los 11.000 m de profundidad.
La diferencia más inmediata reside en el perfil del relieve de cada uno de los casos: mientras la fosa se hunde hacia el centro de la Tierra, la dorsal intenta emerger del fondo, con éxito en ciertas oportunidades, creando islas volcánicas.
Temperatura y formas de vida
La temperatura reinante en cada uno de estos accidentes oceánicos se puede tomar como otra diferencia: mientras que las mediciones de la temperatura promedio de las fosas ronda los 4 ⁰C, la temperatura en las dorsales es notablemente superior, gracias a la incesante actividad volcánica.
Otro punto de comparación son las formas de vida de uno y otro hábitat. En las fosas son escasas y complejas, se trata de individuos especializados, adaptados a la vida bajo presiones aplastantes y muy bajas temperaturas, dotados de mecanismos para la caza y percepción de presas sin necesidad de utilizar la vista, que muchas veces es inexistente.
Por otro lado, en las dorsales la inagotable y permanente actividad volcánica hace que los individuos que allí hacen vida sean de muy baja complejidad biológica, adaptados en este caso a sobrevivir de la transformación de los minerales de las emisiones volcánicas en energía. Estos organismos se consideran la base de toda la cadena alimenticia del océano.
La actividad volcánica es particularmente distinta en ambos ambientes: mientras las fosas son sitios calmos con actividad volcánica nula, las dorsales son un hervidero de lava y emisiones desde el centro de la Tierra.
Ejemplos de dorsales oceánicas
Estas vastas extensiones de montañas submarinas recorren el globo terráqueo en su totalidad. De polo a polo y de este a oeste, se pueden identificar fácilmente. A continuación se presenta un listado de las principales dorsales oceánicas, ordenadas según el continente al que pertenecen:
América del Norte
- Dorsal de Gakkel: se encuentra en el extremo norte del planeta, en el Ártico, y divide las placas norteamericana y eurasiática. Se extiende por unos 1.800 km.
- Dorsal del Explorador: ubicada cerca de Vancouver, Canadá. Es la que está más al norte del eje del océano Pacífico.
- Dorsal de Juan de Fuca: ubicada a continuación y al este de la anterior, entre Columbia Británica y el estado de Washington, en Estados Unidos.
- Dorsal de Gorda: está a continuación de la dorsal anterior y hacia el sur, frente a las costas de California.
América del Sur
- Dorsal Antártico-Americana: se encuentra al sur del continente. Comienza en el llamado Punto de Bouvet en el Atlántico sur, y se desarrolla hacia el suroeste, hasta llegar a las islas Sándwich.
- Dorsal Pacífico oriental: de aproximadamente 9.000 Km, se extiende desde el mar de Ross en la Antártida y, con rumbo norte, llega hasta el golfo de California. De esta nacen otras dorsales secundarias: Dorsal de Nazca: se ubica frente a las costas de Perú. Dorsal de Chile: está frente a las costas de ese país. Dorsal de Galápagos: se encuentra cerca de las islas de las que toma su nombre.
- Dorsal de Scotia: está ubicada al sur del continente y se considera la porción submarina de la cordillera de los Andes. Se presenta como un gran arco que está entre el Atlántico y el Antártico.
África y Asia
- Dorsal Antártico-Pacífico.
- Dorsales Índico occidental, central y oriental.
- Dorsal de Adén, ubicada entre Somalia y la península árabe.
Entre América y Europa
- Dorsales Atlánticas norte y sur.
Europa
- Dorsal de Knipovich: está ubicada entre Groenlandia y la isla Svalbard.
- Dorsal de Mohns: corre entre la isla de Svalbard e Islandia.
- Dorsal de Kolbeinsey: se ubica al norte de Islandia.
- Dorsal de Reikjanes: puede encontrarse al sur de Islandia.
Referencias
- Dorsales Oceánicas. Recuperado de ecured.com.
- Dorsales Oceánicas. Recuperado de insugeo.org.ar.
- Oceanic Ridge. Recuperado de britannica.com.