Te muestro una lista con las drogas más peligrosas y comunes del mundo, con graves efectos en el sistema nervioso, que incluso pueden resultar irreversibles. El uso de las drogas se ha extendido a lo largo de los años, ocasionando grandes problemas para la sociedad. No en vano, muchos gobiernos tratan de ponerle fin a este consumo.
La clasificación de las drogas se puede realizar según su estado legal, su farmacología o si son duras y blandas. Respecto a las primeras, su estado suele variar dependiendo del país.
Las drogas licitas son sustancias que están aceptadas y su consumo es totalmente legal. Pueden ser utilizadas en consonancia con los deseos del consumidor. Ejemplo de este grupo son las bebidas alcohólicas o el tabaco.
Las drogas para medicamentos se utilizan mediante prescripción médica. Deben ser recetadas obligatoriamente por un experto con autoridad. Normalmente, su uso se limita a trastornos de sueños, ánimo o enfermedades dolorosas (calman el dolor).
Las drogas o sustancias ilícitas son ilegales y su consumo está prohibido, perseguido y penado por la ley. Junto a ellas se esconde un gran mercado oculto que se mueve por todo el mundo.
Según su farmacología, existen las drogas depresoras (ralentizan y dificultan la racionalización, pulso o presión sanguínea), drogas estimulantes (activan la actividad física y neurológica) y drogas alucinógenas (producen cambios en la percepción, consciencia o las emociones, como el LSD) o drogas opioides (producen bienestar y eliminación del dolor, como la morfina, metadona o la heroína).
Respecto a su intensidad, las drogas duras causan adición y dependencia tanto física como psíquica de forma conjunta. Entre ellas podemos encontrar la cocaína, opioides, anfetaminas o incluso el alcohol.
Las drogas blandas son ustancias cuya adición es solo física o psíquica, nunca a la vez. Típico de este grupo es el cannabis o la cafeína.
Las drogas más peligrosas para la salud
Cocaína
Esta sustancia es llamada como “el champán de las drogas” debido a su elevado precio. Muy probablemente hayas escuchado hablar sobre ella en diversas películas, siendo en gran parte de ellas una protagonista más.
La sensación que produce es de bienestar y afecta prácticamente a la totalidad del cuerpo. Sus consecuencias van desde un derrame cerebral o un ataque al corazón a la muerte.
Se trata de una de las drogas más adictivas de todo el mercado, la cual ha sido capaz de destruir la vida de miles de personas en todo el mundo. Sin ir más lejos, el diez por ciento de los adultos de Estados Unidos habían consumido esta sustancia en alguna ocasión.
Whoonga
Su uso está extendido por las zonas más delictivas de África. Considerado como la alternativa barata a los medicamentos antirretrovirales, la fabricación de Whoonga se realiza mediante la combinación de medicamentos para el VIH y veneno para ratas.
Respecto a sus efectos, es necesario señalar que es altamente adictiva y puede llegar a producir hemorragias internas, úlceras estomacales e incluso la muerte. La forma de ingesta es similar a la de la marihuana o el tabaco.
Sales de baño
Establecido como la tercera sustancia más peligrosa de todo el planeta tierra, sus efectos son muy parecidos al de las anfetaminas y la cocaína. Esta actúa sobre la personalidad, alterándola de manera que la persona queda expuesta a depresiones, psicosis o incluso pensamientos suicidas. Asimismo, también puede desembocar en un ataque cardiaco.
Sus efectos alucinógenos llevan a la persona hasta límites extremos. Uno de los casos más famosos fue el de un joven americano que fue encontrado comiéndole la cara a otra persona.
Krokodile
Considerada por la gran mayoría de los expertos como la droga más potente y mortal de todas. Su consumo es común de los barrios más pobre de Rusia y de algunas zonas de Europa. Su bajo precio consigue que sea una droga muy atractiva para consumidores de poca capacidad económica.
En cuanto a la composición, se realiza a partir de una combinación totalmente explosiva: analgésicos, yodo, combustibles y productos de limpieza. Ahora bien, sus efectos generan gangrena, sarna y putrefacción en la piel que va comiéndose el cuerpo desde fuera hacia dentro.
Polvo de ángel
Denominada químicamente como fenciclidina, el polvo de ángel está considerado como una de las drogas más temibles del mundo.
Los efectos a los que normalmente conlleva son la pérdida de la capacidad de concentración y el pensamiento lógico, bloqueando el funcionamiento cerebral. Los pensamientos y el estado de ánimo se ven afectados gravemente también.
A largo plazo, produce diferentes síntomas depresivos y pérdida de peso, algo que se puede alargar durante años.
Flakka
Esta sustancia comenzó a comercializarse como un tipo de droga legal para luego prohibirse.
Se trata de un potente estimulante disfrazado de metanfetamina que provoca que el pulso y actividad del corazón se eleve hasta niveles insospechados, lo cual puede desembocar en un fallo cardiaco.
El cerebro tampoco se libra de daños, y es que la flakka afecta directamente a la regulación de setralina y dopamina.
Metanfetamina de cristal
Una de las drogas más extendidas en Latinoamérica – especialmente en México – al ser una de las drogas más fácilmente realizables y manejables. Se estima que tan solo en el país azteca existan cientos de laboratorios clandestinos.
Fue creada en 1887 y su uso se extendió durante la Segunda Guerra Mundial para que los soldados fueran capaces de mantenerse despiertos. Su legalidad se extendió hasta la década de los años setenta.
Su constante ingesta provoca una destrucción paulatina del organismo, afectando a cerebro y huesos.
Se estima que con tres años de consumo de esta droga, el nivel psicótico equivale al de un esquizofrénico de grado alto.
Crack
El crack apareció en los años ochenta y, desde entonces, más de diez millones de personas han sucumbido a esta droga hasta volverlos adictos.
Desde un principio, su rareza elevó su precio hasta cifras desorbitadas, pero con el paso del tiempo, su composición se rebajó a una mezcla de bicarbonato de sodio para que así pudiera estar al alcance de más personas y poder ser vendida a bajo coste.
Su uso puede acaecer en problemas del riñón, de hígado y pulmones, además de producir daños permanentes en los diferentes vasos sanguíneos de nuestro cuerpo.
Heroína
La heroína es todo un “clásico” dentro del mundo de las drogas. Conocida por su alto nivel de adicción, se dice que con solo probarlo una sola vez, ya te vuelves dependiente.
Su uso se remonta al siglo XIX, siendo ideada en 1874 por el químico Alder Wright. Originalmente se utilizaba para tratar los fuertes dolores crónicos y los traumatismos físicos, pero con el paso de los años se convirtió finalmente en una droga ilegal.
Sus efectos se podrían resumir en debilidad muscular, insomnio, escalofríos y daño del sistema circulatorio, desembocando en gangrena.
Escopolamina
Denominada comúnmente como la “droga de la violación” o burundanga, la escopolamina se ha extendido alrededor del mundo, sobre todo en antros y garitos de barrio bajunos. Procede de la planta de las solanáceas, natural de zonas como Ecuador, Colombia y Venezuela y se puede encontrar en forma de polvos.
Como bien indica su apodo, se utiliza para dejar a la persona incapacitada para reaccionar frente a algún tipo acoso. Quien la consume no sabe distinguir entre realidad y fantasía. Una vez pasado el efecto, las víctimas pierden la memoria durante varias horas.
Por otra parte, la CIA reconoció que en 1993 había utilizado la droga como suero de la verdad durante el periodo correspondiente a la Guerra Fría. Sin embargo, los resultados no fueron los esperados.
Purple Drank
En forma líquida y de color morado, se compone de gas mezclado con jarabe para la tos, codeína y prometazina. En otras ocasiones, se puede cambiar el líquido gaseoso por simple agua mineral.
Sus efectos son de euforia máxima, acelerando además las capacidades motoras. Ahora bien, uno de los mayores riesgos a los que se expone el consumidor es al de sufrir una insuficiencia cardiaca y múltiples problemas respiratorios.
Como curiosidad, es común escucharla mencionada en las canciones de rap de artistas como Jay Z o Big Moe.
AH – 7921
Esta droga opioide sintética ha sido lícita hasta enero de 2015 en España, de ahí su sobrenombre de “heroína legal”. Su composición se caracterizaba por tener un 80% de morfina.
Los problemas a los que leva son de tipo respiratorio y circulatorio, como la gangrena. Hasta el momento solo se ha producido una sola muerte, aunque los expertos recalcan constantemente la peligrosidad que conlleva.
Anfetaminas
Uno de los pocos tratamientos médicos que tiene el uso de las anfetaminas está destinado al tratamiento del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).
El riesgo de adicción está presente, aunque suele ser una vez se haya comenzado a consumir de manera rutinaria. Cada vez se necesitan más y más dosis, algo que puede desembocar en una psicosis y esquizofrenia con alucinaciones y delirios.
Khat
Procedente de una planta fanerógama de entre 1,5 y 20 metros, tiene un poderoso efecto narcótico produciendo un estado de euforia seguido de un fuerte estupor.
La sensación de alegría y liberación, vendrá acompañada de risas y locuacidad para desembocar en un “bajón” que puede acabar en un delirium trémens.
A largo plazo puede provocar diferentes tipos de cáncer como el oral o gástrico, además de una hemorragia cerebral, hipertensión o degeneración de los genitales.
Ketamina
La ketamina es conocida como “el calmante de caballo”, ya que su uso está destinado a estos. En cuanto a los efectos que le podemos encontrar está el alucinógeno. Dura alrededor de dos horas, tiempo en el que sentiremos diferentes sentimientos, llegando en ocasiones a puntos extremos.
El consumidor puede llegar a estar tan lejos de la realidad que el riesgo de ponerse en peligro es altísimo.
Su uso continuado provoca efectos secundarios en la vejiga, pérdidas de memoria y diferentes alteraciones psicológicas. Por otro lado, una sobredosis puede conllevar a un fallo respiratorio y posteriormente, al fallecimiento.
Popper
La droga Popper tiene una función placentera, devolviendo una energía que hemos perdido.
Su efecto es inmediato, ya que tan solo lleva unos minutos notarla. Es considerada como una sustancia recreativa de síntesis, que suele ser consumida en diferentes bares, clubes, fiestas y conciertos con el principal objetivo de que el consumidor no decaiga en ningún momento.
El consumo mayor de Popper se da en jóvenes de 18 y 24 años de edad. Los problemas que acarrea son taquicardias, ritmo cardiaco alto, enrojecimiento del rostro y las manos, problemas respiratorios, vómitos, dolores de cabeza y hemorragias nasales.