¿Qué es la endofobia?
La endofobia es el rechazo o aversión hacia características o rasgos del grupo al que uno pertenece, el racismo contra los compatriotas de la propia nación o el rechazo hacia la propia cultura. Es lo contrario a la xenofobia, definida como racismo contra los extranjeros de cualquier nación.
La endofobia tiene una característica especial: tiene influencia directa de referencias socioculturales. No basta con criticar o hacer algún comentario negativo sobre algún aspecto cultural del país propio, tiene que haber una actitud de rechazo o incluso odio hacia los elementos culturales que forman parte de la identidad.
Las expresiones de endofobia no son cosas hechas en rebeldía de las leyes y del resto de la sociedad, por el contrario, son refrendados por las normas de algunos grupos sociales.
Ejemplos históricos de endofobia
Son muchos los casos de endofobia en la historia, el rechazo por lo propio es más común de lo que se pueda pensar. Desde niveles generales que abarcan continentes enteros hasta regiones pequeñas de algún país, la endofobia puede encontrarse en casi cualquier lugar.
Endofobia occidental generalizada
Las civilizaciones occidentales emergieron de la cultura judeocristiana y sus variantes, la herencia grecorromana y de las ideas iluministas.
Se puede considerar que estos factores contribuyeron significativamente a lo que hoy se conoce como Occidente, en el sentido sociocultural de la palabra.
En Occidente también se han producido grandes revoluciones y avances, como la Revolución industrial, el surgimiento de las democracias constitucionales, el estado de derecho y la economía de libre mercado basada en la propiedad privada de los medios de producción.
La más importante de todas las herencias de Occidente fue la abolición de la esclavitud.
Es de preguntarse por qué algunos occidentales atacan más el propio Occidente, que les ha proporcionado los valores que usan para condenarlo, en vez de criticar a otros pueblos y países no occidentales, cuando estos incurren en brutales violaciones de aquello que los occidentales han aprendido a valorar: la vida, la paz y los derechos humanos.
¿Qué derechos humanos existen o existieron en India, Irán, Uganda, Sudán, Cuba, China, o en Rusia? La propia noción de “derechos humanos” surgió en Occidente, es producto de esta cultura. Sin embargo, los occidentales, sean europeos, latinoamericanos, indios americanos u otros, se atacan a sí mismos.
México: resentimiento por la cultura propia
México ha experimentado una encogida cultural sostenida que data de la época colonial, donde los nacidos europeos, llamados peninsulares o gachupines, tuvieron el privilegio de acceder a las mejores posiciones de autoridad y comercio, mientras que los españoles nacidos en México, aunque eran 100% europeos, no podían acceder a tales privilegios.
Esto condujo a la supresión de los acontecimientos mexicanos en favor de importar todo de Europa, como maquinaria, abogados, gobernadores, cultura, arte, ciencia y la opinión cotidiana común entre los colonos, que era una copia de Europa.
Hoy en día, el estrés cultural y la endofobia sigue predominando en todo México, donde las culturas, las actitudes, las tecnologías, las artes y los académicos extranjeros son vistos mucho más favorablemente que los propios académicos, tecnologías y artistas indígenas de México.
El resultado de esto ha sido la fuga de mexicanos competentes y talentosos que han decidido trasladarse al extranjero, principalmente a los Estados Unidos, donde pueden desarrollar sus habilidades y practicar sus talentos.
En los medios populares mexicanos, los presentadores de noticias y de variedades, los actores y actrices de telenovelas, son claramente blancos, a pesar de que la mayoría de la población mexicana es mestiza o india.
Este fenómeno recuerda la vieja actitud colonial del sistema de castas que favoreció la imagen, la cultura y la estética europeas sobre el desarrollo mexicano, que los propios mexicanos perciben como inferior.
Endofobia alemana: después de la Alemania nazi
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, y luego de la derrota de Hitler, la vergüenza por el gran daño hecho a la humanidad socavó la autoestima de los alemanes.
Por otra parte, Alemania fue dividida en Alemania Oriental y Occidental. Luego de la reunificación, hubo un inmenso rechazo de los alemanes occidentales a los orientales, pues los primeros sentían que los otros eran inferiores, o en cierto sentido, traidores, y que retardarían el progreso de la nación.
Referencias
- Phillips, A. (2005). On the Cultural Cringe. Melbourne University Publishing.
- Colin Rodrick (ed.) (1972). Henry Lawson, Autobiographical and Other Writings 1887–1922.