¿Quién fue Pedro Celestino Negrete?
Pedro Celestino Negrete (1777-1846) fue uno de los protagonistas de la guerra de independencia mexicana y de los años posteriores. Militar y político hispanomexicano, llegó a luchar en los dos bandos de la contienda. Más tarde, también participó de forma activa en los conflictos surgidos respecto a la forma de gobierno que debía tener el nuevo país.
Como militar, empezó luchando contra los corsarios que asolaban las costas del entonces virreinato de Nueva España. Como miembro del ejército español, se enfrentó en los primeros años a los sublevados que buscaban la independencia, aunque después terminó por apoyar el Plan de Iguala.
Aunque al principio era cercano a Iturbide, el sistema monárquico seguido por este iba en contra de sus ideas republicanas. Por esto fue uno de los que se unió al Plan de Casa Mata, que buscaba convertir México en una república.
En el plano político, tras triunfar los antimonárquicos, fue uno de los componentes del Supremo Poder Ejecutivo, órgano que rigió durante algún tiempo los destinos de la nación. De hecho, le tocó presidirlo en un par de ocasiones, por lo que se le considera uno de los presidentes históricos de México.
Biografía de Pedro Celestino Negrete
Primeros años
Pedro Celestino Negrete nació en Carranza, una localidad situada en la provincia española de Vizcaya, el 14 de mayo de 1777. Aunque en su infancia ingresó en el seminario de Vergara, muy pronto orientó su carrera hacia el ejército.
Dentro aún de España, ejerció como guardiamarina en Ferrol y en 1802, siendo todavía muy joven, emprendió su primer viaje hacia el continente americano. Su primera misión fue la de luchar contra los corsarios que asaltaban los barcos en la costa de Nueva España. En ese momento, ya había alcanzado el grado de teniente de fragata.
Poco duraría este primer periplo de Negrete por el continente. La llamada Rebelión de los Comerciantes, en 1808, y la invasión de las tropas napoleónicas en la metrópolis, le obligaron a volver a España. Allí estuvo dos años, hasta 1810.
Regreso a México
Tan solo dos años después de su marcha, Negrete fue enviado de nuevo a América. Al llegar, la situación había cambiado. Ya desde 1808 habían comenzado a aparecer grupos que buscaban la independencia, aunque en un principio respetando la soberanía del rey español.
A la llegada de Negrete, la rebelión se había extendido y se había vuelto más radical. A partir del Grito de Dolores, el objetivo era más ambicioso y, además, estaba teñido de reivindicaciones sociales influidas por las ideas liberales llegadas de Europa.
Así, el militar español tuvo como primera misión el engrosar las filas realistas, luchando contra los insurrectos. Las crónicas afirman que su comportamiento en el campo de batalla fue muy activo, demostrando una gran capacidad. Esto le valió para ir subiendo en el escalafón militar, alcanzando el grado de brigadier en muy poco tiempo.
Plan de Iguala
Tras varios años de guerra, tanto abierta como de guerrillas, en 1821 Negrete cambió de bando. Primero, se reunió con Agustín de Iturbide, que también había hecho el mismo recorrido desde las tropas leales a España, hasta los rebeldes, y con quien luchó en el lado realista.
El encuentro tuvo lugar en Yurécuaro, en mayo de ese año. Un mes más tarde, Negrete se incorporó al Plan de Iguala, un manifiesto que conduciría a la proclamación de la independencia del país.
Primeros pasos bajo el mandato de Iturbide
Las primeras misiones encomendadas por Iturbide a Pedro Negrete fueron más diplomáticas que militares. Así, le encargó intentar convencer al realista José de la Cruz para que se uniera a las filas independentistas. De la Cruz, que tenía bajo su mando a una de las tres divisiones que defendían Miguel Hidalgo, rehusó la oferta.
Tras esto, el militar puso rumbo a Durango, entonces ocupada por Joaquín de Arredondo. En esa localidad tuvo lugar un suceso que provocó que Negrete saliera malherido.
Al llegar, se encontró con que Arredondo estaba ausente y al cargo de la guarnición se encontraba otro general, Diego García Conde. Este rehusó siquiera hablar con el enviado de Iturbide, respondiendo a tiros a su presencia. Negrete sufrió una herida de bala en su maxilar de la que, por fortuna, se recuperó en poco tiempo.
Cargos militares
Tras estas vicisitudes, y después de recuperarse de sus heridas, Negrete ocupó sus primeros cargos político-militares. De esta forma, fue nombrado capitán general de San Luis Potosí, Jalisco y Zacatecas.
Sin embargo, cuando Iturbide, con el que tenía una buena relación, se proclamó emperador y organizó el nuevo país como una monarquía de tendencia conservadora, Negrete se mostró insatisfecho y formó parte de un nuevo movimiento con el objetivo de cambiar la situación.
Plan de Casa Mata
Las ideas republicanas y federalistas de Negrete chocaban con la forma de gobierno que estableció Iturbide, al proclamarse emperador. Enseguida esto dio lugar a que diversos sectores se movilizaran para tratar de cambiar las cosas.
De esta forma, el 1 de febrero de 1923, se estableció el conocido como Plan de Casa Mata. Este, encabezado por Santa Anna y al que se unen hombres como Vicente Guerrero o el propio Negrete, tenía como objetivo lograr la abdicación del nuevo emperador.
Según los historiadores, Negrete utiliz+o la amistad que mantenía con Iturbide para presionarlo y convencerle de que lo correcto era que abandonara su trono.
El plan fue un completo éxito. En mayo del 23, el emperador abdicó y salió hacia el exilio. En ese momento, el movimiento opositor comenzó a redactar una nueva constitución.
Supremo Poder Ejecutivo
Mientras se redactaba la nueva carta magna, se creó un órgano que regiría los destinos del país, con el fin de que no ocurriera un vacío de poder. Este organismo fue bautizado como Supremo Poder Ejecutivo y lo formaron tres hombres, entre ellos, Pedro Celestino Negrete.
En alguna ocasión, llegó a presidir el Supremo en solitario, como los seis días de 1824 en los que sus compañeros, Nicolás Bravo y Guadalupe Victoria, se ausentaron de la capital.
Nueva Constitución
Fue precisamente en uno de esos periodos en los que Negrete ostentó la presidencia del país, en la presentación de la nueva Constitución. Fue el 4 de octubre de 1824, y el sistema de gobierno pasó a ser la república. Asimismo, la nación se organizó de forma federal, con 19 estados y un Distrito Federal.
La influencia de la constitución de Cádiz y de la que regía en los Estados Unidos era evidente, sobre todo, en la separación de los distintos poderes: el ejecutivo, el judicial y el legislativo.
Por fin, el 10 de octubre de 1824, se nombró un nuevo presidente, y el órgano interino de gobierno del que formaba parte Negrete se disolvió.
Últimos años y muerte
Un extraño suceso marcó los últimos años de vida de Negrete en México. Una conspiración, encabezada por el fraile Joaquín Arenas, fue descubierta en Ciudad de México. Supuestamente, pretendían devolver el territorio a España y restablecer la monarquía. El fraile fue fusilado, y Negrete y otro general español, José Antonio de Echávarri, se vieron envueltos en la conjura.
Aunque muchos historiadores apuntan a la falta de pruebas en su contra, Negrete fue acusado de participar en esta intentona. Tras un juicio, fue condenado a muerte, pero la pena fue cambiada por el exilio.
Negrete terminó sus días en Burdeos, Francia. Allí falleció a los 69 años, el 11 de abril de 1846.
Referencias
- Pedro Celestino Negrete. Recuperado de durango.net.mx.
- Iguala Plan. Recuperado de britannica.com.