Los regionalismos de Honduras, también llamados localismos, son palabras y expresiones del folclore hondureño que tienen un sentido particular en ese país. En general, los localismos tienden a tener un significado específico en cada país o conjunto de países, es decir, un significado local o regional, de allí el nombre.
Pero también pueden presentarse casos hiperlocales, en los que una palabra o frase solo tiene sentido en una sola región del país. Esto se da en Honduras.
Las fuentes de identidad que dan origen a los regionalismos no solo varían entre países sino también entre localidades, de modo que pueden cambiar dependiendo de la zona del país.
Los regionalismos de Honduras más comunes
Aguacatero: perro criollo, que no tiene raza pura.
Aguacatón: tonto, lerdo.
Amachinarse: arrejuntarse, irse a vivir juntos, como hacen las parejas sin estar casadas.
Arrecho: enojado, molesto.
Bichín: persona con un diente partido o que le falta un diente.
Billullo: una forma de decir dinero.
Camellada: caminata larga y agotadora.
Chele: persona de piel clara, rubia o de ojos claros. Lo que en Venezuela se llama catire o en México güero. No se utiliza de forma despectiva.
Cheto: pez espinoso muy sabroso. Mujer sexy.
Cheque: algo de buena calidad, que funciona. También es sinónimo de estar al día, sin deudas.
Chillo: deuda.
Chunche: una cosa, cualquier cosa.
Chuña: andar descalzo o sin zapatos.
Chupadero: bar.
Colectivo: taxi colectivo.
Cipote: un cipote es un niño y una cipota, una niña.
Desmangado, desmantelado: a toda velocidad.
Enjaranarse: endeudarse.
Juquencia: mal olor.
Le apestan las aletas: le huelen las axilas.
Macizo: algo que causa agrado, sea visual, musical o emocionalmente. Cualquier cosa puede ser maciza, como una prenda, una canción o una fotografía.
Mínimo: siendo Honduras una nación exportadora de bananas, cuando estas no llegaban al mínimo tamaño para su exportación se destinaban para el consumo interno. De este modo, mínimo se convirtió en sinónimo de banana.
Oscurana: oscuridad, cerrazón.
Palmar: morir.
Patachucho: alguien que sale mucho o camina mucho.
Patatús: ataque de convulsiones. La muerte.
Pisto: una forma de llamarle al dinero.
Rispar: salir precipitadamente de un lugar.
Rosquete: pan de harina de maíz amasada con manteca y dulce en forma de rosca y cocido al horno.
Sapo: chismoso, hablador. Se hace el símil con las bocas grandes de los anfibios.
Zampalimones: persona entrometida.
Zarandajo: algo que molesta.
Zurumbo: mareado, tonto, lumbo.
Perra: sinónimo de mentira.
Pijinear: salir por la noche.
Alero: sinónimo de amigo.
Chepa: así se refieren a la policía.
Cachimbear o macanear: agarrarse a trompadas o golpes.
Ejemplos de regionalismos hondureños en frases
El chele tiene billullo y anda patachucho por Tegucigalpa desde que llegó. Ya le apestan las aletas, pero con el pisto que carga le da para cualquier chunche.
Le compramos unos mínimos a un bichín en la calle, el pobre andaba chuña y era medio aguacatón, pero cuando vio el pisto se puso más feliz que cipote comiendo rosquete.
Rispamos del chupadero y dejamos el chillo sin pagar. Le dije que no puede enjaranarse con un cheto si ya vive amachinado con otra.
El colectivo iba desmangado y en una oscurana pensé que íbamos a palmar. A ella casi le da un patatús y a mí el zurumbo me tenía zarandajo.