¿Qué es la sabana de palmeras?
La sabana de palmeras es una extensa ecorregión neotropical que abarca las tierras bajas de la cuenca del suroeste amazónico y se encuentra con la caída oriental de la cordillera de los Andes.
Está ubicada principalmente en la parte norcentral de Bolivia, comenzando en un pequeño territorio del sureste de Perú y terminando en la parte occidental del sur del Amazonas brasileño. También se le conoce como sabana del Beni.
Es uno de los tres grandes complejos de sabanas de Suramérica. Esta zona fue identificada como centro de biodiversidad endémica muy valioso, donde existen abundantes especies animales y vegetales, incluidas especies en peligro.
Características de la sabana de palmeras
– Predominan paisajes relativamente planos de llanuras fluviales, colinas y cerros de baja altura. Sus elevaciones no pasan de los 300 msnm.
– Es una zona de irrigación y desagüe de muchos ríos, algunos de ellos provenientes del deshielo de los Andes. También se encuentran otros elementos hídricos, como lagos, pantanos permanentes y ciénagas.
– Debido a la extensión del área, el clima varía considerablemente. La zona más norteña y oriental es más húmeda durante el año y no sufre tantos cambios por las estaciones. Puede llegar a recibir 3.000 mm de lluvia anual.
– El sur y oeste de la sabana depende más de las estaciones. Más seco en la temporada de sequía, llega a recibir precipitaciones entre 1.500 a 2.100 mm en la estación lluviosa.
– Su temperatura promedio anual oscila entre los 20° y 27° C. Durante el invierno austral puede llegar a recibir frentes esporádicos de vientos fríos del sur, haciendo que la temperatura baje a los 10° por períodos cortos.
– Entre diciembre y mayo (época de lluvias), los ríos se desbordan inundando el terreno, hasta llegar a cubrir un 60% del área total de la sabana y formar cinturones de agua de hasta 10 km de ancho.
– Hay ciertas áreas donde el agua de las lluvias se estanca por encontrarse lejos de los ríos más activos de la región, lo que contribuye a la inundación del territorio.
– En las partes más bajas, las inundaciones pueden durar hasta diez meses. En algunas zonas de altura media, el agua puede cubrir el suelo por cuatro meses, y en las zonas más altas solo por corto tiempo, o a veces no se inundan.
– Otra característica importante son los incendios en la temporada de sequía, que arriesgan los bosques. Sin embargo, muchas áreas, por ser inaccesibles, están resguardadas de la actividad humana.
Flora
La vegetación está influenciada por la selva del Amazonas y el Gran Chaco. Es hogar de aproximadamente 1.500 especies de plantas en las zonas más llanas y planas, y existen alrededor de 5.000 tipos de plantas diferentes en los bosques.
La mayoría de sus especies resisten a las temporadas de sequía e incendios y a las prolongadas lluvias e inundaciones.
Como su nombre lo indica, las palmeras reinan en esta zona, especialmente en la región peruana, acompañadas de extensos pastizales y concentraciones aleatorias de vegetación.
Estas concentraciones son llamadas islas de bosque, que son mantos de bosques tropicales y subtropicales de considerable densidad, con formaciones de plantas que se pueden apreciar claramente aislados en la topografía baja de la región.
Estos bosques húmedos pueden caracterizarse por mantos vegetales de 20 metros de altura en las zonas más bajas. En los terrenos más altos y mejor drenados, la extensión de estos mantos forman terrazas vegetales de hasta 40 metros de alto o más.
Existen algunos árboles en la región cuya madera es muy buena y usada para la construcción.
Entre esas plantas maderables están el árbol de shimbillo, con frutos comestibles, el tahuarí o tahebo, que puede crecer hasta 30 metros de alto y es reconocido por sus usos medicinales, y la caoba, especie vulnerable.
Igualmente, se encuentran el árbol de aguaje, representativo de la zona pantanosa peruana, y el árbol de azúcar huayo, conocido en Colombia como algarrobo criollo, y en Brasil como yatobá.
Otros tipos de arbustos, lianas y plantas florales, como las orquídeas, acompañan los bosques y pastizales de la región.
Entre las especies de palmeras que hacen a esta región famosa, encontramos gran presencia del shapaja o bacurí, con una altura promedio de 18 metros, y el huasaí o açaí, que producen un fruto redondo de color oscuro llamado fruto de los surfistas en Brasil, y de donde además se obtiene el palmito.
Entre otras palmeras se incluyen el ungurahui, originario del Amazonas y esparcido por toda Suramérica, la palma sancona, que puede crecer hasta 30 metros, colocándose como una de las especies más altas, y la Bactris major del Amazonas sur, una especie que no ha sido estudiada en profundidad.
Fauna
En esta región se han reportado cerca de 150 especies de mamíferos. En los ríos abundan los delfines boto o amazónico, mamíferos cetáceos adaptados a la vida selvática.
La nutria gigante también vive cerca de los ríos y lagos de la sabana de palmeras. Su número se ha reducido dramáticamente en las últimas décadas, considerándose en peligro de extinción al oeste y sur de la Amazonía, y casi desaparecida en Bolivia y Perú.
Entre los felinos comunes de la región se encuentran el puma, el jaguar y el gato moro, que es más pequeño y suele tener un pelaje pardo o negro completamente uniforme.
Muchos mamíferos de la zona no se hallan en ningún otro lugar del Amazonas, como el venado de la ciénaga o ciervo de los pantanos, y el lobo melenudo, que se enfrenta actualmente a la extinción.
También existen primates del bosque, como el famoso mono aullador, el mono tití de cola negra, el lucachi o tití del río Beni, el huicoco o tití de orejas blancas y el marikiná de Azara, que también es conocido como mono nocturno de Azara.
Otros mamíferos endémicos son el marsupial colicorto pigmeo, la rata de pasto, el murciélago espectral, el murciélago de behn y el tatú o armadillo de nueve bandas.
Unas 509 especies de aves se avistan en toda esta sabana. Entre ellas está el tinamú de vientre blanco, el gran ñandú común, el chauna común, el águila coronada de Azara, la palomilla de cola larga o tortolita vaquera, el mochuelo de madriguera y el colorido guacamayo barbazul, que se encuentra en peligro.
Reptiles, anfibios y peces son animales muy importantes de la zona, pues mueven la vida en los ríos y lagos. Pero durante las inundaciones su hábitat se ve expandido considerablemente, lo que los hace dominar los suelos durante varios meses.
El caimán negro es un gran reptil que reina en las zonas húmedas de la sabana y los bosques inundados. Sus importantes poblaciones en la zona del Beni se encuentran en riesgo. Convive con el caimán yacaré negro, las anacondas y las cobras falsas.
También se encuentra en los ríos la tortuga charapa arrau, el sapo buey, ranas de la ciénaga, boas constrictoras, las serpientes aguaje machaco y el venenoso sapito pintado o rana de punta de flecha.
Los peces son un elemento crucial para los habitantes de la zona como parte de su dieta, sobre todo en la temporada de inundaciones, donde hay más áreas para la pesca.
Entre los peces más consumidos están el cachama o pacú negro, el boquichico o sábalo y el bagre rallado.
Referencias
- The Great Savanna. Savanna Plant Life. Recuperado de thegreatsavanna.weebly.com.
- Barba Azul Nature Reserve program. Recuperado de armoniabolivia.org.
- Sabana de palmeras. Recuperado de peruecologico.com.pe.