¿Qué es la sensación?
Una sensación es la detección por parte del cuerpo de un estímulo externo o interno mediante los sentidos. Es el paso previo a la percepción, produciéndose antes de que el cerebro sea capaz de interpretar qué significa el estímulo que se acaba de detectar.
La sensación se produce gracias a los diferentes tipos de receptores sensoriales que tenemos por todo el cuerpo, normalmente concentrados en los órganos sensoriales. Después, la información sensorial se transmite al cerebro mediante un proceso llamado transducción; esta nueva información es la que es interpretada por el cerebro y se convierte en percepción.
A pesar de que normalmente se considera que existen tan solo cinco sentidos (vista, olfato, oído, gusto y tacto), nuestro cuerpo es capaz de detectar otros tipos de sensaciones. Algunas de las más importantes son la sensación de hambre, la sensación de sed, o el sentido del equilibrio.
Características de la sensación
Una sensación es la forma más sencilla de proceso mental. Se trata tan solo de una impresión producida en el cerebro por un estímulo. Este estímulo es detectado por un órgano sensorial, y más tarde se transmite a un centro sensorial en el cerebro, donde se traduce en lo que entendemos por sensación.
La sensación pura es algo que no se da en los adultos, debido a que el cerebro interpreta inmediatamente lo que está ocurriendo. De esta manera, el estímulo recibido (que puede venir tanto de fuera como de dentro del propio cuerpo) se convierte de manera inmediata en una percepción.
Las sensaciones puras tan solo se dan en bebés recién nacidos, que aún no pueden interpretar lo que significan los estímulos. Sin embargo, en psicología se habla de sensaciones para comprender mejor el proceso de interpretación que nos lleva a tener percepciones.
Las sensaciones tienen una serie de características que diferencian unas de otras. A continuación veremos las más importantes.
Cualidad
La primera característica fundamental de las sensaciones es su cualidad. Tiene que ver con el tipo de estímulo que las produce; por ejemplo, un sonido produce una sensación con una cualidad distinta a un sabor.
Por otra parte, dentro de estímulos del mismo tipo, también se diferencian en cualidad aquellos que producen una sensación distinta. Por ejemplo, el color rojo tiene una cualidad distinta al amarillo, y ambos tienen una diferente de la del color azul. Lo mismo ocurre con los sonidos, olores o sabores.
Esta diferencia de cualidad está explicada por la teoría de Muller sobre la energía específica de los nervios. Según este psicólogo de la percepción, cada estímulo lleva consigo un tipo de energía que estimula un órgano sensorial.
Éste, a su vez, transmite un tipo concreto de energía al cerebro a través de los nervios sensitivos (como el nervio óptico o el nervio auditivo).
Intensidad
Otra de las características que diferencian a las sensaciones es su intensidad. Aun cuando un estímulo tenga la misma cualidad que otro, puede tener una mayor intensidad, por lo que la sensación que provocará será más fuerte.
En función del tipo de sentido al que nos estemos refiriendo, la intensidad se traducirá de una forma u otra. Por ejemplo, una luz tenue producirá una sensación leve de luminosidad; por el contrario, una luz intensa provocará una sensación luminosa muy fuerte.
Duración
La duración es el tiempo durante el que se mantiene la sensación después de haber sido producida. Esta característica cambia la parte subjetiva de una sensación; por ejemplo, un sonido que dure dos segundos se sentirá de forma diferente a uno que dure treinta.
Umbrales de la sensación
Una de las características más importantes de las sensaciones es su umbral; es decir, la intensidad mínima que debe tener un estímulo para poder producir una sensación en nosotros al menos un 50 % de las veces.
Dentro de la psicología de la percepción, se estudian dos tipos de umbrales:
Umbral absoluto
Es decir, el mínimo de energía por debajo del cual un estímulo ya no provoca una sensación.
Umbral diferencial
También definido como el cambio mínimo de intensidad sobre un estímulo ya aplicado que el cuerpo humano es capaz de diferenciar.
Tipos de sensación
En general se suelen clasificar las sensaciones en tres grandes grupos:
- Sensaciones orgánicas.
- Sensaciones especiales.
- Sensaciones motoras o kinestésicas.
Sensaciones orgánicas
Las sensaciones orgánicas son aquellas sensaciones no producidas por un órgano sensorial concreto, sino que pueden ser sentidas en grandes partes del organismo. Por otra parte, se producen únicamente debido a estímulos internos, provocados por los cambios del organismo.
Las actividades de algunos órganos internos envían el estímulo a los nervios sensoriales, que lo trasladan al cerebro en forma de energía.
Algunas de estas sensaciones orgánicas son el hambre, el sueño, la sed o el dolor interno. En algunas ocasiones también se las conoce como el “barómetro de la vida”, debido a que nos informan sobre las condiciones de nuestro propio cuerpo.
Otra de sus características más peculiares es que no son sencillas de recordar, al contrario que las sensaciones especiales. Además, afectan de manera profunda a nuestro bienestar.
Sensaciones especiales
Las sensaciones especiales son aquellas detectadas con órganos especializados para ello; es decir, todas aquellas que se perciben con los órganos sensoriales. Por lo tanto, el color, el sonido, la temperatura o el dolor son sensaciones especiales.
Su principal función es proporcionarnos información sobre elementos externos a nosotros mismos y, debido a su importancia para nuestra supervivencia, son más fácilmente distinguibles unas de otras y existen mayor cantidad de tipos.
Sensaciones motoras o kinestésicas
Por último, las sensaciones motoras o kinestésicas se encargan de informarnos de los movimientos de nuestro propio cuerpo. Su principal función es ayudarnos a movernos de manera adecuada, además de proporcionarnos información sobre nuestro estado interno.
Diferencias con percepción
Sensaciones y percepciones forman parte del mismo proceso, mediante el cual nuestro cerebro es capaz de transformar un estímulo interno en una interpretación de lo que está ocurriendo en el mundo exterior o en nuestro propio cuerpo.
La principal diferencia entre ambas es que la sensación se produce sin intervención del cerebro, mientras que la percepción está mediada totalmente por la actividad de este órgano.
Sin el cerebro seríamos incapaces de interpretar nuestras sensaciones y, por tanto, no seríamos capaces de elaborar una respuesta a lo que nos ocurre.
Referencias
- “Sensations: Nature, Attribute and Types (With Diagram)” en: Psychology Discussion. Recuperado en: 6 Abril 2018 de Psychology Discussion: psychologydiscussion.net.
- “Sensations and the five senses (psychology)” en: Erupting Mind. Recuperado en: 6 Abril 2018 de Erupting Mind: eruptingmind.com.
- “Sensation (psychology)” en: Wikipedia. Recuperado en: 6 Abril 2018 de Wikipedia: en.wikipedia.org.
- “Sensation” en: Brock University. Recuperado en: 6 Abril 2018 de Brock University: brocku.ca.
- “What is sensation in psychology?” en: Study. Recuperado en: 6 Abril 2018 de Study: study.com.