¿Cuál es la finalidad de la ciencia?
La finalidad de la ciencia es generar conocimientos objetivos, válidos y fiables, tanto para aumentar el saber de la especie humana como para aplicarlos para el bienestar y desarrollo de la especie.
Tradicionalmente, se acepta que el propósito principal de la ciencia ha sido la construcción de conocimiento y comprensión, independientemente de sus posibles aplicaciones. Para llegar a tal conocimiento objetivo se utiliza el método científico, que está constituido por una serie de pasos.
Cuando tomamos la palabra ciencia, que proviene del latín scientia, y que significa “conocimiento”, por analogía se puede afirmar que el preguntarse cuál es la finalidad de ciencia es lo mismo que preguntarse: ¿cuál es la finalidad del conocimiento?
Partiendo de esta analogía, resulta menos abstracta la pregunta, y por consiguiente, un poco más fácil de responder.
Interpretaciones de la finalidad de la ciencia
Si se considera que sobre el concepto o definición de lo que es la ciencia existen infinidad de criterios o ideas, igualmente ocurre con la respuesta a la pregunta de cuál es su finalidad u objetivo.
Se han dado al respecto muchas interpretaciones, que a pesar de ser diferentes unas de otras, no por ello dejan de ser válidas también cualquiera de ellas.
Karl Pearson
El prominente científico, matemático y pensador británico Karl Pearson (1857-1936), reconocido por haber introducido la estadística matemática como disciplina científica, en su libro Gramática de la Ciencia (Grammar of Science, 1892), afirma que “el objetivo de la ciencia no es menos que la interpretación completa del Universo”.
También establece en este trabajo que “el objetivo de la ciencia no radica en explicar los hechos, sino únicamente clasificarlos y describirlos”.
L.W.H. Hull
Para el académico L.W.H. Hull, historiador inglés y reconocido experto en filosofía de la ciencia, la finalidad de la ciencia es mostrarnos la conexión entre fenómenos que asombran o que aterrorizan al ser humano, con otros que, por estar acostumbrados a ellos, no le producen sorpresa ni temor. Así lo estableció en su ensayo titulado Historia y filosofía de la ciencia (History and Philosophy of Science, an Introduction, 1959).
En este ensayo explica que la finalidad de la ciencia es ver patrones regulares y similitudes en donde en principio parecía que solo existían cosas o fenómenos incomprensibles.
También afirma que la finalidad de la ciencia puede ser enseñarnos que sucesos aparentemente diferentes son realmente del mismo tipo, aunque nunca es su pretensión darnos una explicación final o definitiva de nada.
La ciencia puede tener como meta lograr que nuestras interpretaciones del mundo sean más comprensibles y precisas, o ayudarnos a controlar sucesos, enseñándonos la dependencia e interrelación de unos respecto a otros.
Mario Bunge
Otros autores, como por ejemplo, el físico, filósofo, epistemólogo y humanista argentino Mario Bunge (1919-2020), en su libro La ciencia, su método y su filosofía (1960), da una explicación del objetivo o finalidad de la ciencia en función de la clasificación que hace de ella.
Según él, existen dos categorías principales de “ciencia”: la ciencia fáctica pura y la aplicada.
La ciencia pura es aquella cuya finalidad principal es perfeccionar el conocimiento que tiene la humanidad sobre los hechos. Describe y analiza los procesos y fenómenos del mundo con el objetivo de incrementar el conocimiento. Un ejemplo es la biología.
En cambio, la ciencia aplicada o formal tiene una finalidad netamente práctica, como por ejemplo, la economía. Su finalidad consiste en elaborar bases de conocimiento y procedimientos para posibilitar la obtención de los objetos y servicios más apetecibles de la vida.
Referencias
- What is science? – Science aims to explain and understand. Recuperado de undsci.berkeley.edu.
- Bunge, M. (1960). La ciencia, su método y su filosofía. Recuperado de unsj.edu.ar.