¿Quién fue Isidro Barrada Valdés?
Isidro Barrada Valdés (1872-1835) fue un militar español destacado por sus acciones en el campo de batalla del lado realista, dirigiendo el ejército español de Nueva España.
Debido a su desempeño, valor y dedicación en la lucha armada, fue ascendido constantemente y en tiempo récord, pasando de soldado a coronel rápidamente, comandando tropas de hombres en importantes enfrentamientos en Venezuela, Colombia, Cuba y México y manteniéndose siempre fiel a Fernando VII.
Biografía de Isidro Barrada Valdés
Hijo de Matías Barrada y María Valdés, nació en el seno de una familia modesta en Puerto de la Cruz, Tenerife, aunque a pocos años de nacido se trasladaron a Carúpano, en las costas orientales de Venezuela.
Allí se dedicaron al transporte de alimentos, como café y cacao, en embarcaciones marítimas, negocio del que obtuvieron grandes ganancias y con el tiempo pudieron ahorrar una buena fortuna.
Se presume que su padre fue asesinado por José Francisco Bermúdez, un insurgente que, al notar el valor de las ganancias obtenidas por Matías Barrada, le quitó la vida y confiscó todas sus pertenencias, incluidos los activos de su trabajo.
Inicio de su carrera militar
Un joven e impetuoso Isidro Barrada siguió su vocación de lucha alistándose en la milicia, a la que ingresó con 20 años, luego de ganarse un puesto como soldado destacado, mostrando sus habilidades de combate y valor estratégico desde temprana edad.
Embarcados en el bergantín Victoria y con malas intenciones para los intereses de la milicia que servía al rey Fernando VII, las tropas inglesas intentaron desembarcar en Carúpano, ataque que fue exitosamente desarticulado por las labores militares de Barrada y sus compañeros.
Así demostró por primera vez sus habilidades en la batalla, mostrando estar preparado para batallas incluso más importantes, hecho que se confirmó luego con su participación protagónica en el apresamiento de otra embarcación en 1812. Aquella vez defendió el oriente de Venezuela a favor de la corona española, afrontando victorioso el ataque del bergantín Botón de Rosa, protegiendo el territorio entre Güiria y Carúpano.
Principales batallas de Isidro Barrada Valdés
En 1814 ya era teniente, grado en el que solo duró seis meses, pues fue ascendido a capitán y se le asignó una compañía para combatir en los cerros de Barquisimeto. Poco después sirvió en las batallas de San Fernando de Apure y Mucuchíes, todas en territorio venezolano, al mando del Regimiento de Infantería Sagunto.
Movido al regimiento de Numancia, estuvo al frente de otro golpe de gracia para las fuerzas españolas. Contra todo pronóstico, se enfrentó con 400 hombres a los 3.600 del general José Antonio Páez, quien había tomado la plaza de San Fernando de Apure. Barrada se opuso con resistencia y logró disipar las fuerzas de Páez, librando una batalla épica en las llanuras de Mucuritas.
Su patrón de gloria militar continuó cuando se unió a la Tercera División del Ejército Expedicionario hacia Nueva Granada, cumpliendo un rol estelar y de líder en la batalla del Pantano de Vargas contra Simón Bolívar. En dicha contienda volvió a romper con todas las estadísticas, logrando desalojar a más de 500 hombres del bando enemigo con tan solo 80 granaderos en su frente.
Sin embargo, su esfuerzo solo valió para este acontecimiento en particular, pues los patriotas finalmente derrotaron a los realistas y lograron liberar la Gran Colombia el 7 de agosto de 1819 al triunfar en la batalla de Boyacá, en la que Barrada conocería la derrota.
Los soldados del Ejército Expedicionario de Costa Firme fueron derrotados y quedaron confundidos y dispersos. Barrada sobrevivió al ataque y logró reunir los miembros de su compañía que también habían escapado. Un año más tarde, en 1820, perdió su segunda batalla consecutiva, la del Peñón de Barbacoas, que provocó su partida hacia Cartagena.
En esas tierras obtuvo de inmediato la confianza para comandar a 400 hombres contra los rebeldes, esta vez avanzando hacia Turbaco. Salió victorioso al vencer a 1.500 patriotas, siendo herido de bala en la pierna durante la gesta. Fue el protagonista de este enfrentamiento y calificado como distinguido y heroico.
Con el grado de teniente coronel, Barrada lideró el rescate a Francisco Tomás Morales en Maracaibo, de vuelta a Venezuela, en 1823.
Mediante su gestión de refuerzo a Morales, sitió a la corbeta María Francisca y rescató a 240 tropas conformadas por soldados provenientes de Coro leales a la corona española, acción que le valió la faja militar roja, una distinción que enaltecía sus labores. Adicionalmente, ascendió a comandante de batallón de infantería de línea.
Político y jefe militar en Cuba
Barrada, quien había vuelto a España como emisario de Morales, recibió la encomienda del rey para llevar a Cuba dos ordenanzas que indicaban restablecer el régimen absolutista en la isla, los Reales Decretos de 3 y 29 de octubre de 1823.
El siguiente año fue promovido a coronel y se le otorgó la distinción Cruz Laureada de San Fernando. Luego se le encomendó reforzar la isla de Cuba, uno de los pocos pueblos que aún permanecían leales a Fernando VII. Armó un batallón para resistir cualquier ataque, aunque con serios problemas para captar voluntarios canarios.
Partió hacia Martinica con poco más de 1.000 hombres a bordo del bergantín Eudogia, escoltado por seis embarcaciones menores y por las fragatas Clorinde, Nimphe y Tenus, que los acompañaron en distintos trayectos hasta Cuba.
En la isla fue nombrado gobernador de Santiago de Cuba y comandó los batallones de La Habana. Poco después su cargo fue elevado a gobernador político y militar de Cuba, donde permaneció hasta 1826.
Durante su ejercicio político-militar en Cuba tuvo grandes confrontaciones internas, traiciones y rivalidades que empañaron su gestión. Posteriormente, estuvo al frente del Regimiento de Infantería de la Corona desde la isla, con lo que logró subir aún más en su posición militar al ser nombrado brigadier de infantería.
Intento de reconquista de México
El panorama era alentador para la monarquía en México. Luego de luchar por su independencia durante un largo tiempo, la hambruna y la pobreza imperaban. El rumor era que los mexicanos anhelaban volver a la época de la colonia, cuando se encontraban bajo el dominio español.
Apoyado por sus aliados internacionales, como la Santa Alianza y el gobierno de Gran Bretaña, el rey decidió encomendar una misión sin precedentes a Barrada: comandar la reconquista de México.
El brigadier, quien voluntariamente se había postulado para el mando de la misión, emprendió la Expedición Barradas con el Real Ejército de Vanguardia y llegó al puerto mexicano el 26 de julio de 1829 con 3.500 hombres.
Al llegar no recibió el apoyo que suponía de parte de los mexicanos. Se enfrentó al general Antonio López de Santa Anna en distintas contiendas que marcaron el fin de las intentonas de reconquista de los españoles en tierras americanas.
Luego de la victoria mexicana en la batalla de Tampico el 21 de agosto de 1829, y del Combate del Fortín de la Barra el 10 y 11 de septiembre, Barrada firmó la capitulación de su ejército el 11 de septiembre.
Escape y muerte
Barrada salió de México y se trasladó hacia Estados Unidos con parte de sus soldados rendidos para buscar la manera de volver a España. Sus enemigos en Cuba, principalmente el capitán Dionisio Vives, ordenaron la detención de Barrada apenas pisase tierras españolas para enviarlo a juicio y condenarlo a muerte, luego del fracaso de su expedición en Tampico.
Situado en París y al tanto de los rumores que corrían sobre su pena de muerte, Barrada decidió quedarse en el exilio. Sus detractores lo acusaban de haberse rendido ante los mexicanos, traicionando el mandato de la corona española.
Isidro Barrada tuvo un hijo en Francia, país donde permaneció en condiciones de pobreza y precariedad hasta su muerte, el 14 de agosto de 1835, a causa de una enfermedad.
Referencias
- Hernández González, M, La emigración canaria a América (1765-1824),
- De la Rosa Olivera, L. El brigadier Barrada o la lealtad. Anuario de Estudios Atlánticos.
- Cervera Pery, J. La marina española en la emancipación de Hispanoamérica.
- Pérez Tenreiro, T. Ángel Laborde y Navarro, capitán de navío. Relación documental de los sucesos de Venezuela, 1822-1823. Instituto Panamericano de Geografía e Historia.
- Fragmentos de La Gazeta de Madrid, publicada el 10 de junio de 1828.