¿Qué es un mapa conceptual?
Un mapa conceptual es una herramienta de estudio que consiste en la representación visual de una serie de conceptos y la relación existente entre ellos. Permite abarcar de una sola mirada el panorama completo de un tema de estudio, con sus definiciones, categorías, subcategorías, funciones, características, entre otros.
Los mapas conceptuales no sustituyen a los libros, artículos u otros textos en los que el tema de estudio se explica y desarrolla. Por sí mismos, los mapas conceptuales solo pueden mostrar la estructura superficial del tema sobre el que fueron diseñados.
Su verdadero potencial como herramienta de estudio consiste en mostrar de manera visual, en el espacio que puede abarcar una sola mirada, la lógica según la cual se estructura el conocimiento que el estudiante ya conoce, porque ha leído con atención los textos que constituyen la fuente de ese conocimiento.
Dicho de otro modo, aunque el mapa conceptual puede ser un método eficaz de repaso para un examen, su utilidad como método de aprendizaje está en elaborarlos y no tanto en leerlos sin contar con conocimientos previos sobre el tema.
Origen de los mapas conceptuales
Los mapas conceptuales fueron empleados por primera vez por Joseph Novak, un científico de la Universidad de Cornell, en los años 70.
Novak dirigía una investigación sobre los procesos cognitivos que llevan a cabo los niños para comprender los conceptos científicos.
En las últimas etapas de la misma, con una cantidad ingente de información extraída de centenares de entrevistas a los niños, Novak cayó en cuenta de que no contaba con un método expositivo con el que pudiera presentar adecuadamente sus conclusiones.
Buscando una solución a su problema, inventó los mapas conceptuales, que desde entonces se han hecho muy populares.
Características de un mapa conceptual
– Estructura jerárquica: están organizados jerárquicamente, con los conceptos más generales y amplios en la parte superior y los conceptos más específicos y detallados en la parte inferior.
– Nodos: cada concepto es representado por un nodo o círculo en el mapa conceptual, el cual puede contener una o varias palabras clave.
– Líneas de enlace: los nodos están conectados por líneas de enlace, que representan las relaciones entre los conceptos. Estas líneas pueden ser de diferentes tipos, como por ejemplo, de causa-efecto, de comparación o de contraste.
– Palabras clave: en los nodos se utilizan palabras clave o frases cortas para resumir los conceptos, lo que facilita la comprensión y la memorización de la información.
– Esquema visual: los mapas conceptuales son una herramienta visual, lo que facilita la comprensión y la retención de la información.
– Flexibilidad: los mapas conceptuales son flexibles y pueden ser modificados y actualizados fácilmente, lo que permite que se adapten a medida que se adquiere nueva información.
Cómo hacer un mapa conceptual paso a paso
Primer paso: elige un tema
Puede ser una interrogante cuya respuesta estás buscando, un problema que necesitas resolver o un tema general. Para este ejemplo, elegiremos esta última opción: nuestro mapa conceptual tratará sobre la célula humana.
Segundo paso: revisa los conocimientos que ya posees
Interrógate a ti mismo: ¿qué cosas ya sé sobre la célula humana? Deja que las ideas y recuerdos fluyan libremente. No te inhibas, no se trata de un examen.
Usa esos conocimientos que ya tienes —sean muchos o pocos— para trazar un primer borrador del mapa conceptual.
Por ejemplo, quizás sabes que las células humanas son de varios tipos, aunque no recuerdes ahora cuáles exactamente. También recuerdas que tienen varias partes, como el citoplasma, aunque ninguna otra parte venga en este momento a tu mente.
Pues bien: ya tienes cómo empezar. En el centro de tu mapa conceptual colocarás el tema principal: la célula humana. Y ya sabes que dos de los nodos serán “Tipos” y “Partes”, y que este último nodo se conecta con otro que debe decir “Citoplasma”.
Tercer paso: investiga
Naturalmente, nadie lo sabe todo. Y para poder completar tu mapa conceptual tienes que obtener los conocimientos que te faltan.
Ponte a la búsqueda: revisa libros de texto, artículos en internet, vídeos, podcasts, pregúntale a tus profesores o incluso a un compañero con altas calificaciones en biología.
Cuarto paso: subraya, toma nota, selecciona
Mientras lees o escuchas sobre las células humanas, no te olvides de subrayar o tomar nota de lo realmente importante sobre el tema. ¿Cuáles eran las otras partes de la célula humana que no recordabas? ¿Ya conoces todos los tipos de células humanas que existen?
Quinto paso: revisión
¿Ya tienes toda la información que necesitas? ¿Te gustaría incluir algunos elementos más? ¿No falta nada? Si todo está bien, ya puedes empezar a completar tu mapa conceptual. El resultado podría ser parecido a este:
Diferencias entre mapa conceptual y mapa mental
Mapa conceptual | Mapa mental | |
Estructura | Jerárquica | Radial |
Nodo | Palabra clave o concepto | Imagen o palabra clave |
Líneas de enlace | Conectan nodos según su relación jerárquica o semántica | Conectan nodos según su relación de asociación libre |
Uso | Para organizar información compleja y relacionar conceptos | Para generar y registrar ideas, conceptos y asociaciones en forma libre |
Objetivo | Analizar y comprender información de manera profunda | Generar ideas y fomentar la creatividad |
Aplicaciones | En educación, ciencias y técnicas para análisis profundos | En resolución de problemas, toma de decisiones y presentaciones visuales creativas |
Otros ejemplos de mapas conceptuales
Mapa conceptual sobre la contaminación
Mapa conceptual sobre los seres vivos
Elementos del mapa conceptual
Un mapa conceptual consta de varios elementos, que son:
- Concepto: es la palabra en la que se engloba una situación o un significado.
- Palabras de enlace: son las que relacionan los conceptos (no son conceptos).
- Proposición: son dos o más conceptos relacionados por palabras de enlace en un mismo nivel jerárquico.
- Líneas de enlace: son líneas que sirven para unir los conceptos relacionados.
- Conexiones cruzadas: son líneas que relacionan dos conceptos ubicados en diferentes niveles del mapa.
Todos estos elementos ayudan a plasmar momentos de creatividad o de comprensión de conceptos a la hora de elaborar el mapa conceptual.