La historia de la ergonomía inicia en los años 40, cuando emerge como disciplina científica. Surgió al comprender que habría más beneficios de los equipos si estos se diseñaban para los seres humanos, y que estos aprendieran a usarlos de forma adecuada,
En términos sencillos, la ergonomía es el estudio y el diseño de los equipos e instrumentos que mejor le cuadran al cuerpo humano y a sus movimientos naturales. La ergonomía básica ha existido desde que los primeros ancestros del humano moderno comenzaron a crear herramientas primitivas para facilitar las tareas.
Después de la Revolución industrial, las máquinas y los equipos de las fábricas comenzaron a ser construidos con consideraciones de diseño, a las que hoy nos referiríamos como características ergonómicas.
La ergonomía en el sentido moderno comenzó a popularizarse durante la Segunda Guerra Mundial. Los equipos militares, la maquinaria y las armas —específicamente los aviones— se hicieron mucho más complejos.
Después de las innovaciones de la Segunda Guerra Mundial, la ergonomía continuó floreciendo, ya que sus principios se empezaron a aplicar a tecnologías más modernas.
La ciencia de la ergonomía moderna incluye el trabajo de ingenieros industriales, médicos ocupacionales y muchos otros campos. Casi cada aspecto de la vida moderna incluye un nivel de diseño ergonómico.
Y así, entonces, podemos dar una definición de ergonomía: es esa disciplina encargada de diseñar lugares de trabajo, objetos, herramientas y tareas, basándose en las características fisiológicas y anatómicas de los individuos, con el fin de optimizar la tríada humano-máquina-ambiente. De esta forma, se produce más con menos molestias de los trabajadores.
La ergonomía en la prehistoria
La importancia de un buen diseño entre los humanos y las herramientas fue notado muy temprano en el desarrollo de la especie. La historia de la ergonomía data de la época de los primeros humanos.
El Austrolopitecus prometheus seleccionó piedras útiles como herramientas e hizo cucharas de huesos de antílope, en un claro intento de crear y seleccionar objetos para hacer las tareas más fáciles y eficaces.
Edad Antigua
Se ha encontrado evidencia arqueológica de herramientas, equipos para la caza y otros implementos en dinastías egipcias y en la antigua Grecia. Estas herramientas eran elaboradas por el ser humano e ilustraban principios ergonómicos bastante sofisticados para su época.
Por ejemplo, Hipócrates (460-370 a.C.) diseñó la forma en que debía organizarse el lugar de trabajo de un cirujano, así como las herramientas más adecuadas.
La ergonomía en el siglo XX
El biólogo polaco Wojciech Jastrzebowski (1799-1882) empleó por primera vez el término ergonomía, en 1857, siendo profesor de Ciencias Naturales en el Instituto Agrónomo de Varsovia.
Jastrzebowski, con sus estudios, sentaría las bases para lo que hoy se conoce como ciencia del trabajo, si bien la palabra ergonomía no sería ampliamente aceptada hasta 1949.
Los primeros conceptos para ayudar a los trabajadores a operar más productivamente fueron publicados a mediados de 1900.
A mediados de 1900, la producción de la industria era ampliamente dependiente del poder humano y los conceptos ergonómicos eran desarrollados para mejorar la eficiencia del trabajador.
La administración científica del trabajo, un método que mejora la eficiencia del trabajador al mejorar el proceso y los tiempos, se volvió popular.
Revolución industrial
Con la Revolución industrial, las máquinas, como la hiladora Jenny (una máquina que produce hilos para hacer tela) y los trenes de laminación (un método de planchar minerales en láminas delgadas), fueron desarrollados para mejorar los procesos de trabajo. Esta es la misma motivación detrás de la mayoría de los aspectos de la ergonomía.
El ingeniero mecánico estadounidense, Frederick W. Taylor (1856-1915), fue un pionero en este acercamiento y evaluaba trabajos para determinar la mejor manera en la que podían ser realizados. Fue lo que se llamó taylorismo. El taylorismo fue un método diseñado para que un trabajador, de cualquier industria, pudiese ser lo más productivo posible con la menor cantidad de movimientos y de gasto de energía.
En Bethlehem Steel, Taylor incrementó dramáticamente la producción de los trabajadores y los sueldos en unas tareas de paleo, al combinar la pala con el tipo de material movido (cenizas, minerales o carbón).
Por su parte, Frank y Lilian Gilbert hicieron que los trabajos fueran más eficientes y menos fatigantes a través del análisis del movimiento y las herramientas estandarizadas, materiales y el proceso de trabajo.
Al aplicar este proceso, el número de movimientos al colocar los ladrillos se redujo de 18 a 4,5, permitiendo que se incrementara el ritmo de su colocación de 120 a 350 ladrillos por hora.
La mayoría de los diseños de esta época eran creados para incrementar la velocidad y la eficiencia de la producción, no se enfocaban en crear comodidad de uso para los trabajadores involucrados.
La ergonomía en la Segunda Guerra Mundial
Se considera la Segunda Guerra Mundial como el principio real del estudio de la ergonomía.
La Segunda Guerra Mundial dio pie al gran interés en la interacción entre el humano y la máquina, dado que la eficiencia del equipo militar sofisticado (como los aviones) podía estar comprometida por el mal diseño o un diseño confuso.
En este sentido, evolucionaron notablemente los conceptos de diseño de máquinas apropiadas para el tamaño del soldado y los botones de control lo suficientemente entendibles y lógicos.
Los psicólogos experimentales estudiaron los accidentes aéreos y llegaron a la conclusión de que muchos de los accidentes ocurrían debido a diseños pobres o ilógicos que no tomaban en cuenta el cuerpo humano. Este fue el comienzo del estudio de las capacidades humanas, foco propio de la ergonomía.
Las características cognitivas humanas se empezaron a tomar en cuenta para el diseño de las máquinas. Así fue que la ciencia de los factores humanos se desarrolló en el contexto de la psicología aplicada.
La ergonomía moderna
Actualmente, este campo científico no solo provee diseños cómodos y seguros, como aquellos que previenen los errores humanos y los que se encuentran en productos de uso común. También se expande a las áreas de medicina, herramientas de guerra, aviación, sistemas de tráfico e instalaciones públicas.
A partir de 1960, la disciplina se extendió a los equipos de computadora, seguido por el estudio del software para las computadoras en los 70. Más adelante, incorporó el uso del internet y la automatización de la tecnología de adaptación, a partir del 2000.
En Estados Unidos, los investigadores se concentraron en las ciencias de comportamiento, como la psicología experimental y la tecnología. Por su lado, el énfasis en Europa ha sido la fisiología humana.
Hoy en día, la ciencia de la ergonomía es una combinación de varias disciplinas, incluyendo la psicología, la ingeniera y la fisiología.
Cuando se habla de ergonomía ya no se refiere a los problemas y quejas físicas. La ergonomía actual se ha convertido en un campo muy amplio que busca algo más que la prevención de los problemas de salud.
Su foco actual es cómo se puede alinear el ser humano con la ejecución de sus tareas. Si esto se realiza de manera correcta, se pueden tener muchas ganancias de tiempo y niveles de productividad más altos. Y muchas menos lesiones o enfermedades debidas a malas posturas.
Referencias
- The history of ergonomics. Recuperado de ergosource.com.
- A brief history. Recuperado de ergonomics.org.uk.
- The history of ergonomics. Recuperado de bakkerelhuizen.com.