¿Qué es el totalitarismo?
El totalitarismo es el conjunto de ideologías, movimientos y regímenes políticos basados en que el Estado ejerce el poder total, eliminando divisiones y restricciones. Los ciudadanos no son libres o su libertad es escasa, y se establece un modelo de sociedad homogéneo y coercitivo.
Los totalitarismos se distinguen de los regímenes autocráticos en que son dirigidos o practicados por un solo partido político que se comporta como “partido único”. Este anula las demás manifestaciones políticas, y se funde con otras instituciones del Estado, por lo que constituye una hegemonía radical.
El totalitarismo suele exaltar la figura de un personaje político principal, cuyo poder es ilimitado y se extiende por todos los ámbitos económicos, políticos y sociales.
La autoridad se ejerce mediante un fuerte sistema jerárquico, impulsado por un movimiento de masas en el que se desea encuadrar a toda la sociedad. Se busca crear una “sociedad perfecta” o una “persona nueva”, basándose en las ideologías y valores que plantee el partido único.
Para desarrollar esta idea, los regímenes totalitarios emplean el uso excesivo de la propaganda junto con diferentes mecanismos y herramientas de control social, como la represión o la policía secreta.
En términos generales, el totalitarismo se caracteriza por no reconocer los derechos humanos y restringir la libertad del individuo.
También desconoce la dignidad del ser humano, denigrándolo o reduciendo su existencia a “las masas”. Solo reconoce al ser humano en su carácter colectivo, enajenado y manipulable; de ahí su relación con el concepto de “masas sociales”.
Este régimen político considera al Estado como un fin en sí mismo, por lo que lo maximiza de manera radical y suprime los intereses del ciudadano. Benito Mussolini, representante emblemático de esta ideología, dijo una frase que lo resume bien: “todo en el Estado, todo para el Estado, nada fuera del Estado, nada contra el Estado”.
Orígenes del totalitarismo
- Relaciones del término con el fascismo italiano. Uno de los primeros en utilizar el término fue el dictador italiano Benito Mussolini, que se refería al movimiento que él ideó, el fascismo, como totalitario, aunque lo utilizaba de forma halagüeña. Su célebre frase, citada arriba, define exactamente lo que es el totalistarismo. Por eso, resulta indispensable entender la relación entre fascismo y totalitarismo.
- De totalitario a totalitarismo. Posteriormente, el término lo empleó un grupo de intelectuales alemanes que repudiaban las ideologías de Hitler; entre ellos destacaron Franz Neumann y Herbert Marcuse. No obstante, la primera vez que se utilizó la palabra “totalitarismo” como sustantivo fue en 1941. Luego el término se expandió de Alemania e Italia a Francia y Estados Unidos, donde se encontraba gran parte de los adversarios exiliados por el régimen nazi. También empezó a circular entre las líneas opositoras al partido de Josef Stalin, especialmente desde pensadores como Boris Souvarine y Victor Serge.
- Entrada al mundo académico. Las palabras “totalitario” y “totalitarismo” surgieron de los enfrentamientos políticos, pero pronto dieron un salto rápido al mundo académico debido a que muchos de los adversarios de los regímenes eran intelectuales. Este factor influyó en la producción de una serie de textos en los que se hablaba sobre el totalitarismo, como Humanismo integral, de Jacques Maritain (1936), o La novedad del totalitarismo en la historia de Occidente (1940), de Carlton Joseph Hayes. Uno de los autores más famosos que criticó de manera frontal al totalitarismo de Stalin fue George Orwell, cuyos trabajos más emblemáticos fueron Rebelión en la Granja (1945) y 1984 (1949). Durante la Guerra Fría surgió la primera teoría científica sobre el totalitarismo, el texto Los orígenes del totalitarismo (1951) de Hannah Arendt. Esta pensadora fue la primera en unir al estalinismo y al nazismo bajo un solo concepto: el totalitarismo. Arendt establece que el totalitarismo se puede definir como la “supresión radical por parte del Estado de la política”, entendiendo esta última como una actividad a través de la que los ciudadanos son libres de participar en las decisiones de poder. Con la erradicación de la política, el Estado convierte a los individuos en artefactos prescindibles.
Características según enfoques académicos
Como ideología radical, el totalitarismo cuenta con una serie de características que lo definen. Sin embargo, estas pueden variar dependiendo del enfoque filosófico o de los diferentes autores que hablen sobre los regímenes totalitarios.
Según la escuela de Frankfurt
– Manipulación del Estado. La escuela de Frankfurt estableció que los regímenes totalitarios se caracterizaban por su capacidad de manipulación y de persuasión a través de una serie de procesos de transferencia epistemológica. Para filósofos como Theodor Adorno y Max Horkheimer, el fascismo y el nazismo constituyen una serie de fenómenos sociopolíticos que se caracterizan por unir al poder y a la conciencia, fusionándolos en una especie de sincronía.
– Se basa en prejuicios irracionales. Para la escuela de Frankfurt, el totalitarismo se alimenta de los prejuicios irracionales, latentes en el sustrato más profundo de las masas. En consecuencia, estos regímenes se alimentan de las carencias intelectuales de las masas, consideradas no pensantes.
– Irracionalidad de la razón. Para Theodor Adorno el totalitarismo se fundamenta en una mistificación del pensamiento, en la que la razón pierde su capacidad de comprender y percibir al otro y lo considera como un enemigo. Por ejemplo, la irracionalización colectiva consecuencia de la sociedad de masas se nutre de miedos irracionales, como la xenofobia o la misoginia.
Según Hannah Arendt
– Nacionalismo tribal. En sus obras, Arendt establece que un factor característico del totalitarismo es su necesidad de un “nacionalismo tribal” que responde a una necesidad primitiva e irracional de proteger lo autóctono, lo patriótico y “lo puro”. Por ejemplo, en el nazismo se puede hallar este “nacionalismo tribal” en la necesidad de preservar la “raza aria”, desprestigiando a los demás seres humanos que no encajen con estas particularidades raciales.
– La propaganda. Para Arendt, el totalitarismo utiliza la propaganda excesiva para expresar sus ideologías radicales a través de un lenguaje lógico que disimula un lenguaje mitológico o profético. Es decir, crea toda una fantasmática propagandística con la finalidad de construir un imaginario colectivo que resulte seductor para el público, especialmente para la masa considerada no pensante. En el nazismo, la propaganda se enfocaba en destacar una supuesta conspiración judía que requería de la defensa del pueblo alemán “autóctono”.
Según Raymond Aron
Para Aron, el totalitarismo se caracteriza por la creación de una ideología cuya aplicación tiene como objetivo dominar totalmente a la sociedad.
En su texto Democracia y totalitarismo (1965), definió cinco factores que determinan a los regímenes totalitarios:
– La creación de un partido único que posee el monopolio de todas las actividades políticas.
– Ideologización del partido, que le permite absorber toda autoridad.
– El Estado crea un monopolio en torno a los medios de comunicación y de persuasión con la finalidad de censurar y manipular toda información.
– La economía es controlada en su totalidad por el Estado, por lo que se busca erradicar a la empresa privada.
– Toda actividad resulta politizada; por ejemplo, las artes se colocan al servicio de la ideología. Si ocurre alguna falla en el sistema, esto es considerado como un atentado en contra de la ideología y del partido.
Causas del totalitarismo
Según Hannah Arendt, existen varias causas o factores que pueden fomentar el surgimiento de un régimen totalitario.
- Intolerancia. Esta autora explica que un grupo de individuos o una persona se convierten en un blanco fácil del pensamiento totalitario cuando las creencias propias se aceptan como verdades absolutas, abandonando la capacidad de tolerancia con aquello que difiere de su opinión.
- División de la sociedad. Los regímenes de este tipo se nutren de esta falta de tolerancia, ya que fundamentan sus bases políticas en una narrativa constituida por un “ustedes contra nosotros”. Luego de que ocurrió esta intolerancia con respecto al otro, el régimen solo debe aislar a la masa de los demás pensamientos, truncando el acceso a las distintas formas de pensar.
- Polaridad. Otra de las causas del surgimiento del totalitarismo se encuentra en el hecho de que los seres humanos, debido a su instinto primitivo, necesitan discernir entre “los buenos y los malos”. Esta necesidad binaria se puede corroborar, por ejemplo, en el éxito de las telenovelas o de las películas de superhéroes, en las que el bien y el mal se enfrentan constantemente, sin posturas intermedias.
Ejemplos de gobiernos totalitarios
- Unión Soviética bajo Stalin (1924-1953). La Unión Soviética se transformó en un Estado totalitario. El Partido Comunista ejercía el control estricto sobre toda la sociedad. Se limitaron las libertades individuales, se implementó la colectivización agraria y se instauró un pensamiento único. Bajo la sospecha de “enemigo del Estado”, Stalin persiguió a sus opositores, y llevó a cabo purgas masivas que resultaron en el encarcelamiento y ejecución de millones de personas.
- Alemani nazi (1933-1945). Bajo el liderazgo de Adolf Hitler, el régimen nazi en Alemania estableció un gobierno totalitario durante la década de 1930. Los nazis controlaban todos los aspectos de la vida, desde la política y la economía hasta la educación y la cultura. Se llevaron a cabo purgas, se suprimieron las libertades individuales y se cometió el genocidio contra los judíos y los gitanos.
- China bajo Mao Zedong (1949-1976). Mao Zedong estableció un régimen totalitario en la República Popular China. Durante el Gran Salto Adelante y la Revolución Cultural, en China se ejerció un control absoluto sobre la sociedad, eliminando opositores políticos, suprimiendo la libertad de expresión y llevando a cabo políticas que resultaron en la muerte de millones de personas.
- Cuba bajo Fidel Castro (1959-2008). Después de la Revolución cubana de 1959, Fidel Castro estableció un gobierno comunista que se convirtió en un régimen totalitario. El Partido Comunista de Cuba, a día de hoy, controla todas las instituciones y actividades, y las libertades civiles y políticas son inexistentes.
- Corea del Norte (desde 1948). Desde su fundación en 1948, bajo el liderazgo de Kim Il-sung y su sucesión dinástica, Corea del Norte es un ejemplo contemporáneo de totalitarismo. El Partido de los Trabajadores de Corea ejerce un control absoluto sobre la sociedad, limitando las libertades personales, controlando los medios de comunicación y persiguiendo a quienes expresan opiniones contrarias al régimen.
Consecuencias del totalitarismo
- Aislamiento internacional. Los regímenes totalitarios a menudo enfrentan el rechazo y la condena de la comunidad internacional debido a sus prácticas autoritarias. Esto desemboca en sanciones económicas y diplomáticas que afectan la situación económica y política del país (por ejemplo, Cuba).
- Desconfianza y miedo. La naturaleza represiva de los regímenes totalitarios crea un ambiente de desconfianza generalizada, haciendo que todos sospechen unos de otros.
- Falta de pluralismo político. En un régimen totalitario, existe un partido o un líder que detenta el poder absoluto, limitando o eliminando la participación de otros partidos políticos.
- Violación de derechos individuales. El totalitarismo restringe y viola los derechos individuales y las libertades civiles de los ciudadanos. Esto incluye la supresión de la libertad de expresión, el derecho a la reunión pacífica, la privacidad y otros derechos fundamentales.
- Represión política. Los regímenes totalitarios recurren a la represión política para eliminar opositores reales o imaginarios. Una prueba son los arrestos arbitrarios, detenciones sin juicio, ejecuciones extrajudiciales y purgas sistemáticas.
- Censura y control de la información. El totalitarismo decide qué se informa a la población, por ello ejerce un control absoluto sobre los medios de comunicación. Se quiere moldear la percepción pública al limitar el acceso a información crítica o contraria al gobierno.
Referencias
- Características y consecuencias del totalitarismo. Recuperado de sites.google.com.
- El totalitarismo. Recuperado de losojosdehipatia.com.es.
- Hannah Arendt: ¿Cómo surgen los regímenes totalitarios? Recuperado de pijamasurf.com.
- La crueldad ideológica de los totalitarismos. Recuperado de prodavinci.com.
- Totalitarismo. Recuperado de es.wikipedia.org.