¿Qué es la adelfa?
La adelfa (Nerium oleander) es una especie arbustiva perenne, altamente tóxica, perteneciente a la familia Apocynaceae del orden Gentianales. Conocida como baladre, laurel de flor, laurel romano o rosa laurel, es una especie nativa da la cuenca mediterránea.
Es una planta ampliamente utilizada como ornamental debido a sus vistosas flores de vivos colores que crecen en posición terminal en sus ramas. Como cultivo comercial, se han desarrollado diversas variedades de diferentes colores, lo que las hace muy populares en ambientes cálidos y templados.
La planta es un arbusto perennifolio de 3-6 m, de tallo verde y flácido, ramificado a partir de la base. La floración estival se presenta de manera abundante en primavera y verano, con flores de diversos colores, principalmente rosa y blanco.
Nerium oleander es una planta extremadamente tóxica, empleada en medicina tradicional para promover el aborto. Asimismo, se utiliza para el tratamiento de enfermedades venéreas, malaria e hidropesía, y como emplasto para aliviar la tiña y la sarna.
Son frecuentes las intoxicaciones, tanto en humanos como en animales, debido al consumo de infusiones o al masticar hojas. Las intoxicaciones accidentales o con fines medicinales no son mortales debido a su efecto emético.
Características de la adelfa
– Morfología. Arbusto perennifolio de crecimiento rápido y poco ramificado, que alcanza los 6 m, de corteza lisa y grisácea.
– Hojas. Lanceoladas de margen recto, agrupadas en verticilos de tres unidades, de 6-12 cm, pecioladas, glabras, coriáceas y tonalidad verde-grisácea.
– Inflorescencias. Se agrupan en cimas terminales corimbiformes, con numerosas flores fragantes de 3-5 cm de diámetro de tonalidades rosa, blanco o amarillentas. Las flores hermafroditas poseen un cáliz globular profundamente dividido en tres sépalos triangulares u ovados, de pétalos asimétricos, simples o dobles. Frecuentemente florece en primavera.
– Fruto. Es una legumbre fusiforme erecta con dos folículos, pubescente, de 8-15 cm, de color pardo-rojizo. Este fruto es dehiscente al secarse, y al abrirse libera numerosas semillas pilosas de color pardo y de 4-7 mm de largo.
Taxonomía de la adelfa
- Reino: Plantae.
- Subreino: Tracheobionta.
- División: Magnoliophyta.
- Clase: Magnoliopsida.
- Subclase: Asteridae.
- Orden: Gentianales.
- Familia: Apocynaceae.
- Subfamilia: Apocynoideae.
- Tribu: Wrightieae.
- Género: Nerium.
- Especie: Nerium oleander L.
Etimología
Nerium proviene de la palabra griega Nerion, que alude a Nereo, el dios del mar y padre de las nereidas. Oleander es un adjetivo derivado del latín olea, por la semejanza de sus hojas al olivo, y dendron de árbol.
El nombre común adelfa proviene del griego dafne (laurel) debido a su semejanza con el laurel, a través del árabe diflá.
Hábitat y distribución de la adelfa
Nerium oleander es una especie nativa de la cuenca del Mediterráneo hasta la región al sureste de China, limítrofe con Vietnam. En la actualidad ha sido introducida ampliamente en regiones de clima templado, siendo utilizada en parques, jardines, como setos, parterres o separadores.
Es una planta que se adapta a condiciones de clima seco, tolera las bajas temperaturas, pero solo las heladas ocasionales. Es resistente a los vientos fuertes, altas temperaturas, sequía estacional y tolera suelos ligeramente áridos.
Está distribuida en América, desde Estados Unidos, donde se considera invasora en algunos ambientes urbanos, hasta Panamá, Venezuela, Colombia, Uruguay y Argentina. Igualmente, se ha adaptado a condiciones templadas áridas y secas en países del sur de Europa, Asía y Australia.
Cultivo y cuidados de la adelfa
- Cultivo en vivero. La propagación natural de la adelfa se efectúa a través de semillas, pero de forma comercial se realiza por esquejes.
- Esquejes: se seleccionan de plantas madre sanas y vigorosas, cultivadas en ambientes silvestres o bajo condiciones de invernadero. El proceso productivo a nivel de vivero tiene una duración de un año. En efecto, la selección de los esquejes, de 15-20 cm de longitud y con 2-3 nudos, se realiza al finalizar el invierno.
- Sembrar los esquejes: se siembran en bandejas de enraizamiento sobre un sustrato de turba rubia y perlita, de pH 6,5 y ligeramente fertilizado. Una temperatura promedio de 25-30 ºC, riego continuo por aspersión y polisombra de 65%, permiten alcanzar el enraizamiento a los 30 días.
- Trasplante: se realiza a los 30-45 días, en macetas o bolsas de polietileno con un sustrato suelto y fértil. Se recomienda sembrar 2-3 esquejes enraizados por maceta para obtener una planta de follaje denso.
- Poda: a los 60 días después del trasplante es oportuno realizar una poda apical para que la planta forme macolla y genere nuevos tallos. Esta práctica permite estimular la brotación de un mayor número de brotes florales, obteniendo una planta más productiva ornamentalmente.
- Riego: el manejo del cultivo requiere fertiirrigación periódica junto a productos enanizantes que compacten el desarrollo de la planta. Las aplicaciones se realizan en intervalos semanales, dependiendo de cada variedad cultivada.
- Estimulación: en invierno comienza el reposo vegetativo de la planta, estimulando de esta forma la proliferación de brotes florales. De hecho, la floración se inicia a comienzo de la primavera, durante abril-mayo del siguiente año, siendo este el momento oportuno para iniciar la venta.
- Manejo y cuidados. Las adelfas son plantas resistentes a condiciones adversas que requieren cuidados mínimos para su optimo desarrollo. Sin embargo, es conveniente brindar las condiciones adecuadas para que la planta exprese su máximo potencial durante el proceso de floración.
- Suelos. Como ornamental se adapta a diversos tipos de terrenos, prefiriendo los suelos sueltos, profundos, fértiles y bien drenados. Cultivada en macetas, requiere recipientes de gran volumen y profundos, con un sustrato nutritivo para expresar su mayor desarrollo productivo.
- Iluminación y temperatura. Requiere buena iluminación, se recomienda sembrar en espacios abiertos, a plena exposición solar. Además, se adapta a un amplio rango de temperatura, siendo susceptible a las heladas menores a los 10 ºC, sufriendo daños en los botones florales.
- Riego. Requiere riegos moderados pero constantes para evitar que el suelo se seque por periodos prolongados. El principal objetivo es facilitar la absorción de los nutrientes aplicados por fertilización para promover un mayor desarrollo vegetativo.
- Fertilización. Es recomendable la aplicación de abono orgánico o fertilización granulada diluida en el agua de riego o dispersar al voleo alrededor de la planta. La fertilización frecuente con un producto de contenido equilibrado de N-P-K y microelementos es apropiado para asegurar una floración intensa.
- Podas. Las podas se realizan al finalizar la floración para estimular la formación de nuevos brotes y darle vigor a la planta. Estos brotes durante el invierno tendrán tiempo de crear un mayor número de yemas florales.
Plagas y enfermedades de la adelfa
Las principales plagas que ocasionan daños comerciales a la adelfa son la arañita roja, las cochinillas y los pulgones. Otras plagas de menor incidencia y ocasionales son los caracoles, las babosas y algún tipo de oruga de coleóptero o lepidóptero.
- Las arañitas rojas (Tetranychus urticae) se presentan habitualmente en épocas secas y cálidas, siendo controladas con aplicaciones puntuales de acaricidas.
- La mayor incidencia de los pulgones (Aphis sp.) ocurre sobre los brotes tiernos. Son insectos transmisores de virosis, su control se realiza con insecticidas sistémicos.
- Las cochinillas (Planococcus sp., Dactylopius sp.) son insectos muy difíciles de controlar debido a su coraza protectora. Se ubican habitualmente en los tallos o en la nervadura de las hojas, su control se realiza con insecticidas sistémicos y aceites minerales.
De las enfermedades, la causada por la bacteria Pseudomonas syringae es frecuente en plantas cultivadas de forma silvestre. La trasmisión se realiza a través de herramientas de poda contaminadas, siendo los principales síntomas agallas y deformaciones a nivel de tallo.
Usos medicinales de la adelfa
- Sistema cardiovascular. La adelfa contiene diversos metabolitos que le aportan propiedades medicinales, principalmente relacionados con el sistema cardiovascular y el corazón. Entre estos elementos se encuentra la oleandrina, un glucósido cardíaco empleado para el tratamiento de insuficiencias cardiacas. No obstante, este elemento es altamente tóxico, por lo que su uso artesanal puede resultar perjudicial si se consume sin vigilancia médica.
- Anticancerígeno. Por otro lado, debido a la manera como la oleandrina actúa en el organismo, se deduce que puede usarse para combatir el cáncer. De hecho, la oleandrina retrasa el crecimiento celular, siendo útil en el tratamiento del cáncer en sus primeras etapas.
Toxicidad de la adelfa
La adelfa es una planta muy tóxica por la presencia de los glucósidos cardíacos digitoxigenina, folinerina y oleandrina. Toda la planta contiene estos compuestos, siendo la raíz y las semillas donde se presentan las mayores concentraciones.
Por ser una planta ornamental muy llamativa, las personas tienden a intoxicarse al masticar sus hojas o flores sin conocer el peligro. Los signos de intoxicación son malestar general, hipotensión, mareo, confusión, náuseas, vómitos e irritación buco-gastrointestinal con dolor abdominal.
De forma similar, la combustión del follaje, tallos y ramas de la adelfa produce gases venenosos que pueden afectar a las personas. Afecta el sistema digestivo y el corazón, y en menor medida, el sistema nervioso y la motricidad.
Referencias
- Adelfa (Nerium oleander). Recuperado de murciasalud.es.
- Nerium oleander. Recuperado de elarbol.org.
- Nerium oleander. Recuperado de floresyplantas.net.
- Nerium oleander. Recuperado de es.wikipedia.org.
- Porcuna, J.L. Ficha Técnica Plantas. Servicio de Sanidad Vegetal. Valencia.