¿Qué son los opiliones?
Los opiliones son un grupo de animales que pertenecen al filo Arthropoda y a la clase Arachnida, que se caracterizan por la extrema longitud de las patas en la mayoría de las especies que lo conforman.
Este orden fue descrito por primera vez a mediados del siglo XIX por el zoólogo sueco Carl Jakob Sundevall. Se cree que tuvo su origen en la era Paleozoica, específicamente en el período Devónico, pues los fósiles más antiguos que se han recuperado de este grupo datan de dicho período.
Dentro del orden de los opiliones existen aproximadamente unas 6.500 especies, ampliamente distribuidas por casi todos los ecosistemas del planeta.
Taxonomía de los opiliones
- Dominio: Eukarya.
- Reino: Animalia.
- Filo: Arthropoda.
- Clase: Arachnida.
- Orden: Opiliones.
Características de los opiliones
– Cuerpo. No está claramente dividido, como en la mayoría de los arácnidos. En consecuencia, se ve un tronco globoso que incluye el cefalotórax y el abdomen.
– Longitud de las patas. Se distinguen por lo largo de las extremidades.
– Sin veneno. A pesar de pertenecer al grupo de los arácnidos (como las arañas y alacranes), no poseen glándulas que sinteticen veneno, por lo que carecen de este mecanismo para capturar e inmovilizar a sus presas.
– Celoma. Este tipo de arácnidos tienen una cavidad interna que se conoce como celoma, en la cual se desarrollan los diferentes órganos que conforman al animal. Así mismo, los opiliones están constituidos por dos mitades exactamente iguales, tomando como punto divisorio imaginario el eje longitudinal del cuerpo.
Morfología de los opiliones
Así como ocurre con el resto de los arácnidos, el cuerpo de los opiliones está dividido en dos segmentos o tagmas: prosoma (cefalotórax) y opistosoma (abdomen). La diferencia más marcada con respecto a los otros arácnidos, es que la delimitación entre ambos segmentos no es muy clara ni notoria.
Igualmente, los opiliones presentan seis pares de apéndices articulados: dos quelíceros, dos pedipalpos y ocho patas.
- Prosoma o cefalotórax. Es el segmento o tagma anterior del cuerpo del animal. Tiene una longitud promedio de 15 mm. Está formado por aproximadamente unos seis segmentos. El prosoma está cubierto por una especie de capa protectora de consistencia dura y resistente, conocida como escudo prosómico. En el escudo prosómico es posible apreciar varios orificios. En la parte central, tiene una protuberancia donde se alojan los órganos de la visión del animal. Asimismo, en el área lateral presenta aberturas donde desembocan unas glándulas características de este orden de arácnidos: las glándulas repugnatorias. En el prosoma se originan los apéndices articulados del animal. La porción ventral del prosoma está ocupada casi en su totalidad por las coxas de las patas. En la superficie dorsal del escudo prosómico se puede observar, entre el nacimiento de los quelíceros y el borde frontal, unas estructuras denominadas láminas supraquelicéricas.
- Quelíceros. Los quelíceros de los opiliones no presentan glándulas de veneno. Están conformados por tres artejos, denominados distal, medio y basal. Son de corta longitud y terminan en una pinza. La función principal de los quelíceros es la captura e inmovilización de la presa, en aquellas especies que tienen hábitos carnívoros.
- Pedipalpos. Son el segundo par de apéndices de los opiliones. A diferencia de otros arácnidos, estos no se diferencian mucho de las patas, es decir, son delgados y de gran longitud. En algunas especies terminan en una uña. Están conformados por seis artejos, de lo distal a lo proximal: tarso, tibia, patela, fémur, trocánter y coxa.
- Patas. Es uno de los elementos característicos de este orden. Son muy delgadas y largas, pudiendo incluso sobrepasar la longitud del cuerpo del animal. Pueden llegar a medir más de 12 cm. La función de las patas está relacionada con la locomoción. A pesar de que muchos piensen que la longitud de las patas pueda entorpecer el desplazamiento del animal, esto no ocurre, ya que pueden moverse con bastante rapidez.
- Opistosoma o abdomen. El opistosoma presenta un claro patrón de segmentación. Está conformado por un total de 10 segmentos. En esta parte del opilión se encuentran alojadas la mayor cantidad de estructuras que conforman los diferentes sistemas orgánicos. También presenta una especie de cubierta rígida, conformada por la unión de diferentes placas más pequeñas, llamadas esternitos. Es importante destacar que en la superficie del opistosoma se localizan algunas aberturas que pertenecen a distintos sistemas del cuerpo. Por ejemplo, en los esternitos número 2 y 3 se encuentran, en posición lateral, los espiráculos en los que desembocan los conductos respiratorios. En este mismo orden, hacia el extremo anterior, se localiza la abertura genital, mejor conocida como opérculo vaginal. En el extremo posterior se encuentra el opérculo anal.
- Anatomía interna
- Sistema circulatorio. El sistema circulatorio es bastante rudimentario y simple. El órgano principal es un corazón, con forma cilíndrica y con siete ostiolos. El corazón se aloja en un especio denominado cavidad pericárdica. Con respecto a los vasos sanguíneos, aquí se aprecia una única arteria aorta que emerge del corazón y que comienza a ramificarse en arteriolas cada vez más angostas, las cuales llegan a las células del animal. El líquido que circula por los opiliones es hemolinfa.
- Sistema nervioso. Los opiliones presentan un sistema nervioso muy rudimentario, conformado básicamente por acúmulos de neuronas que a su vez constituyen ganglios nerviosos. Tal como ocurre con todos los arácnidos, en los opiliones hay un ganglio que hace las veces de cerebro. Igualmente, los diferentes ganglios que conforman su sistema nervioso están íntimamente relacionados y comunicados con estructuras del sistema digestivo, como el esófago y el intestino. En lo referente a los órganos sensoriales que tienen los opiliones, se afirma que cuentan con ojos simples, los cuales no son capaces de distinguir imágenes nítidas. Estos solo logran diferenciar la luz de la oscuridad. Además, no tienen receptores sensoriales especializados, ya que no tienen tricobotrios ni estructuras sensoriales en las extremidades.
- Sistema digestivo. El sistema digestivo de los opiliones es completo, muy similar al de otros miembros de la clase Arachnida, aunque con algunas diferencias bien marcadas. Entre esas diferencias, la más representativa es que no cuentan con un estómago propiamente dicho. En primer lugar, el tracto digestivo está conformado por un orificio bucal que se abre a una cavidad, que se comunica directamente con un tubo cilíndrico muy corto, el esófago. Este se continúa con el llamado intestino medio, que finalmente culmina con el orificio de salida, el ano. Conviene mencionar que a nivel de la cavidad bucal existen células especializadas en la secreción de enzimas digestivas, de gran ayuda en la degradación y procesamiento de los alimentos que ingiere el animal. Finalmente, a diferencia de otros arácnidos, los opiliones carecen de hepatopáncreas.
- Sistema respiratorio. El tipo de respiración es traqueal. Su sistema respiratorio está conformado por una serie de conductos ramificados conocidos como tráqueas. Conforme se van adentrando en el cuerpo del animal, las tráqueas se ramifican en conductos cada vez más pequeños, llamados traqueolas, los cuales llegan hasta las células llevando el oxígeno que estas necesitan. En las traqueolas se realiza el intercambio gaseoso. Las tráqueas se comunican con el exterior mediante unos agujeros llamados espiráculos. A través de estos entra el aire cargado con oxígeno y sale el dióxido de carbono como desecho de la respiración.
- Sistema reproductor. Los opiliones son organismos diódicos. Esto quiere decir que los sexos están separados, razón por la cual hay individuos de sexo masculino y femenino. Los machos presentan un órgano copulador que tiene la particularidad de ser protáctil. Esto quiere decir que puede proyectarse hacia afuera durante el momento de la cópula. En el caso de las hembras, también hay un órgano protáctil, el ovopositor. Este posee unas estructuras conocidas como receptáculos seminales, que sirven para almacenar el esperma después de la copulación.
Clasificación de los opiliones
El orden Opiliones está integrado por un total de cuatro subórdenes: Laniatores, Cyphophthalmi, Dyspnoi y Eupnoi.
- Laniatores. Abarca organismos cuyo exoesqueleto presenta ciertos elementos como espinas y protuberancias. Además sus patas no tienen tanta longitud como la de otras especies de opiliones.
- Cyphophthalmi. Se caracterizan porque sus patas no superan en longitud al cuerpo. Son pequeños, no llegando a medir más de 8 mm. Están presentes en todos los continentes, exceptuando Asia.
- Dyspnoi. Son casi exclusivos del hemisferio norte, específicamente de las zonas templadas. Los opiliones de mayor tamaño pertenecen a este suborden.
- Eupnoi. Los miembros de este suborden se caracterizan por tener ojos prominentes, patas muy largas y espinas notorias en sus pedipalpos. Se distribuyen por toda la geografía mundial, prefiriendo áreas templadas en su mayoría.
Distribución y hábitat de los opiliones
Este grupo de animales se encuentra ampliamente distribuido por todo el mundo. El único sitio donde aún no se han encontrado ejemplares es en el continente antártico.
Ahora bien, los opiliones han desarrollado capacidades para adaptarse a los diferentes tipos de ecosistemas que hay en el planeta. Por eso pueden encontrarse en desiertos, bosques y selvas. Sus sitios predilectos son bajo rocas o piedras, en cuevas, en la hojarasca e incluso en el detritus.
Los opiliones son animales que tienden a mantenerse agrupados, por lo que ha sido posible encontrar poblaciones con una gran cantidad de individuos.
Alimentación de los opiliones
Este grupo de animales constituye una excepción entre los arácnidos. Esto se debe a que su dieta no es netamente carnívora, sino que también pueden alimentarse de plantas, hongos e incluso materia orgánica en descomposición. Se han registrado especies que consumen también la carroña de otros animales.
El tracto digestivo es de tamaño reducido, razón por la cual no pueden ingerir partículas muy grandes de alimento.
Cuando el alimento es de gran tamaño, el animal segrega una serie de enzimas digestivas que comienzan a degradarlo. Una vez convertido en una especie de papilla, el animal lo ingiere. Este pasa al esófago y luego al intestino medio, donde se realiza la absorción de nutrientes. Finalmente, los desechos son expulsados a través del ano.
No todas las especies tienen este mecanismo de alimentación. Hay algunas que logran ingerir el alimento y entonces el proceso digestivo se realiza en su totalidad dentro del cuerpo del animal.
Reproducción de los opiliones
El tipo de reproducción es sexual. Para que ocurra es necesaria la fusión de un gameto femenino con uno masculino. Los opiliones cuentan con fecundación interna, desarrollo indirecto y son ovíparos.
El proceso de fecundación se da cuando el macho introduce su órgano copulador en el ovopositor, depositando el esperma allí.
Luego de que ocurre la fecundación, la hembra procede a poner lo huevos. Sin embargo, no es un proceso que en todos los casos ocurra de manera inmediata. Hay especies en las que la postura de los huevos se puede demorar hasta algunos meses después de la fecundación.
Cuando los huevos eclosionan, el individuo que sale de allí está en forma larvaria. Posteriormente, experimenta una serie de mudas. A partir de la primera muda pasan de larvas a ninfas. El promedio de mudas es seis. Una vez alcanzan la madurez, no experimentan más mudas.
Especies representativas de los opiliones
El orden Opiliones abarca 6.500 especies aproximadamente.
Leiobunum politum
Pertenece al suborden Eupnoi y a la familia Sclerosomatidae. Presenta un cuerpo de color castaño y unas patas muy largas que se van adelgazando conforme se alejan del cuerpo. Se localiza principalmente en Norteamérica.
Pantopsalis listeri
Son animales con el cuerpo totalmente negro, pertenecientes al suborden Eupnoi. Además presentan quelíceros cubiertos por dientes irregulares. Sus patas son muy largas, exceden en gran medida la longitud del cuerpo.
Pelltonichya sarea
Conocida por algunos como araña albina, esta especie se caracteriza por su color pálido y sus pedipalpos desarrollados, que poseen dientes que utiliza para capturar a sus presas.
Referencias
- Barrientos, J.A. (ed.). Curso práctico de Entomología. Asociación española de Entomología, CIBIO y Universitat Autònoma de Barcelona.
- Curtis, H., Barnes, S., Schneck, A. y Massarini, A. Biología. Editorial Médica Panamericana. 7° edición
- Merino, I. y Prieto, C. Orden Opiliones. Revista IDEA-SEA.
- Pinto-da-Rocha, R., Machado, G. y Giribet, G. (eds.). Harvestmen – The Biology of Opiliones. Harvard University Press