¿Qué es la cebra?
La cebra (Equus) es un mamífero placentario que pertenece a la familia Equidae. Su principal rasgo distintivo es el patrón de rayas en blanco y negro que presenta en su cuerpo. Son un diseño único que identifica a cada especie. La piel es negra y la coloración de las bandas se debe a la melanina. Los pelos que poseen este pigmento toman un color negro, mientras que los que no lo tienen son blancos.
Existen tres especies: la cebra común (Equus quagga), la cebra de Grevy (Equus grevyi) y la cebra de montaña (Equus zebra). Todas habitan en el continente africano, de donde son originarias, siendo distribuidas en regiones específicas. Suelen vivir en sabanas, matorrales espinosos, pastizales, colinas costeras y montañas.
Las poblaciones de cebras han sido impactadas negativamente por diversos factores antropogénicos, como la caza y la destrucción del hábitat. Debido a esto, la UICN ha incluido a las tres especies en su lista de animales con riesgo de extinguirse.
Estos ungulados son más activos durante el día. En la noche, gran parte del grupo descansa sobre el pasto, mientras el macho dominante vigila y resguarda a la manada.
Características de la cebra
– Tamaño. El tamaño y peso de la cebra varía según la especie. La cebra común (Equus quagga) pesa aproximadamente 350 kilos y mide de 2 a 2,6 metros de largo, con una cola de 0,5 metros de longitud. La cebra de Grevy (Equus grevyi) es más grande, con un peso de 350 a 450 kilos. Su cuerpo mide de 2,5 a 2,75 metros, desde la cabeza hasta la cola. Su altura, desde el hombro hasta el casco de la pata, es de aproximadamente 1,5 metros. La cebra de montaña (Equus zebra), tiene un largo de 2,1 a 2,6 metros, con una cola que mide entre 40 y 55 centímetros. El peso de esta especie está alrededor de 204 y 372 kilos.
– Rayas. Antes, la cebra se consideraba un animal de cuerpo blanco y rayas negras. Esta afirmación se basaba en el hecho de que algunas tienen el vientre totalmente blanco. No obstante, la evidencia embriológica demuestra que el color de la piel es oscuro y que las rayas y el abdomen blanco se deben a la pigmentación del pelaje. Esto sucede por la acción de las células epiteliales especializadas, conocidas como melanocitos, que tienen melanina, un pigmento que oscurece la piel (los pelos que se encuentran en crecimiento). Así, los que contienen melanina toman un color negro y los que carecen de esta, son blancos. De manera general, las rayas son verticales en el cuello, la cabeza, el tronco y los cuartos delanteros. En cuanto a las extremidades y la parte posterior, las líneas son horizontales.
– Especies
Equus quagga: la cebra común o de la llanura tiene una crin erecta, con líneas negras y blancas. Las franjas negras del cuerpo son anchas y están separadas por espacios blancos. Entre estos dos colores hay intercaladas unas tenues líneas de color marrón suave. La cara luce negra debido a las bandas, y el hocico es oscuro. En casi todos los miembros de esta especie, las líneas se extienden hasta la parte media del abdomen. En algunas ocasiones las franjas pueden estar ausentes en las extremidades, el pecho y a los costados.
Equus zebra: en cuanto a la cebra de montaña, las rayas son menos gruesas que las de la cebra común, y no llegan hasta la parte media de la región ventral. La crin es erecta y las franjas son más gruesas. En el abdomen y en el pecho tiene una línea negra.
Equus grevyi: la cebra de Grevy se caracteriza por poseer un patrón de franjas delgadas en blanco y negro, con el abdomen blanco. El diseño de las líneas en la crin es una continuación de las que presenta el animal en la cara. El hocico no es totalmente negro, como en las otras dos especies. Un aspecto distintivo de esta especie, es el borde blanco que rodea la boca y la nariz. Además, posee una gruesa franja dorsal, que tiene a los lados unas bandas delgadas blancas. En la cara tiene una mancha en un tono café oscuro.
– Desplazamientos. La cebra tiene cuatro tipos de movimientos para desplazarse; trote, caminata, galope y galope rápido. Generalmente, es más lenta que el caballo, pero tiene una gran resistencia que la ayuda a escapar de la amenaza. Cuando la persiguen, puede desplazarse zigzagueando de lado a lado, dificultando así el ataque de su depredador. Si está acorralada, la cebra se levanta en dos patas y pateará o morderá al atacante.
– Sentidos. Este animal tiene una excelente vista. Como la gran mayoría de los ungulados, los ojos están ubicados a los lados de la cabeza, lo que le proporciona un amplio campo de visión. Además, posee muy desarrollado el sentido de la audición. En cuanto a sus orejas, puede girarlas hacia casi cualquier dirección.
– Dentición. Los dientes de la cebra tienen adaptaciones para el pastoreo. Los incisivos inferiores y superiores son fuertes, lo que le permite cortar eficientemente la hierba. Además, tiene grandes dientes de corona alta, que le facilita triturar y moler los pastos ricos en silicato.
Taxonomía y especies de la cebra
- Reino: Animal.
- Subreino: Bilateria.
- Filo: Chordata.
- Subfilo: Vertebrado.
- Superclase: Tetrapoda.
- Clase: Mammalia.
- Subclase: Theria.
- Infraclase: Eutheria.
- Orden: Perissodactyla.
- Familia: Equidae.
- Género: Equus.
- Subgénero: Equus (Hippotigris).
Especies
- Equus grevyi.
- Equus zebra.
- Equus quagga.
Subespecies
- Equus quagga boehmi.
- Equus quagga chapmani.
- Equus quagga quagga.
- Equus quagga borensis.
- Equus quagga crawshayi.
- Equus quagga burchellii.
Existe una controversia en cuanto a la clasificación taxonómica del Equus hartmannae. Algunos especialistas la consideran una especie, mientras que otros opinan que forma parte de una subespecie del Equus zebra, por lo que, en este caso, su nomenclatura científica es Equus zebra hartmannae.
Hábitat y distribución de la cebra
La cebra es nativa de África, pero cada especie se desarrolla en su propia área. La cebra común vive en los pastizales y los bosques del sur y del este de África. La cebra de Grevy habita al norte de Kenia y en las áridas praderas de Etiopía. Y la cebra de montaña se localiza en Namibia, Sudáfrica y Angola.
- Cebra de Grevy. Esta especie se encuentra en Etiopía, al sur y al este del país, en la depresión de Danakil, en el valle de Awash y en el valle de Rift. También habita en algunas reservas al norte de Kenia. Las poblaciones han desaparecido de Djibouti, Eritrea, Somalia y Sudán. Su hábitat natural está formado por zonas semidesérticas, donde existen mosaicos de matorrales y pastizales. También se localiza en pastizales de planicies de inundación. En México, obviamente, es una especie exótica, encontrándose al centro y norte del país, en el Estado de México y en Tamaulipas. Allí vive en bosques tropicales caducifolios y en matorrales xerófilos.
- Cebra común. Se distribuye en la región central de Angola, Botswana, sur de Etiopía, Kenia, Malawi, este de Sudáfrica, Tanzania, Uganda, Zambia y Zimbabue. Habita en las sabanas abiertas, matorrales, pastizales tropicales y bosques abiertos. De manera ocasional puede encontrarse en lugares montañosos y poco escarpados, de hasta 4.400 m s.n.m. Esta especie está frecuentemente en las estepas, bosques y sabanas con terrenos firmes, pero donde existan cuerpos de agua. Además, prefiere las regiones con abundancia de pastos cortos, aunque pueden adaptarse a aquellos con hierbas de mayor talla. Fue introducida al norte de México y ahora reside en Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Querétaro, Sonora, Tamaulipas y Veracruz. En estos lugares vive en pastizales, matorrales xerófilos y bosques tropicales perennifolio.
- Cebra de montaña. Se distribuye en los riscos cercanos al mar y en las montañas áridas de Angola. También vive en Namibia, al oeste de Sudáfrica y al sur de la Provincia del Cabo. En cuanto a los tipos de vegetación, el Equus zebra se encuentra en las sabanas tropicales, los pastizales templados de montaña, los matorrales tropicales y en las tierras altas de Karoo. En México fue introducida, y forma parte de la fauna exótica. En la actualidad ocupa diversas áreas en Coahuila y Tamaulipas, donde habita en matorrales xerófilos.
Vulnerabilidad de la cebra
De manera general, las poblaciones de las tres especies han disminuido. Muchos son los factores que han influido en esta situación, pero principalmente es la caza furtiva. Debido a esto, la UICN ha incluido a la cebra dentro de la lista de los animales en peligro de extinguirse.
Cada especie está categorizada en niveles diferentes. Así, el Equus grevyi es considerado en peligro de extinción, mientras que en el Equus quagga, la población ha crecido levemente, por lo que su riesgo a extinguirse es menor.
En cuanto al Equus zebra, el número de cebras registradas en su hábitat natural es bajo y está expuesta a diversas amenazas que la hacen vulnerable a que continúe disminuyendo.
- Amenazas
- Caza. El ser humano ha cazado a la cebra hasta casi extinguirla, como ocurrió en la década de 1930 en Ciudad del Cabo, Sudáfrica. La razón de su captura es comercializar su carne y piel, así como algunos órganos usados con fines medicinales. También compite con el ganado por forraje, por lo que en ocasiones es sacrificada por los ganaderos para proteger su rebaño.
- Degradación del hábitat. El humano ha talado y fragmentado los diferentes ecosistemas donde habitan las cebras. Las tierras se usan con fines agrícolas, pecuarios, urbanísticos, recreacionales y turísticos. Esto trae consecuencias nefastas, entre la que destaca la disminución del caudal de las fuentes naturales de agua. El acceso de los animales a ríos y arroyos está disminuyendo en varias regiones de África. Dicha problemática es crítica en el río Ewaso Ng’iro, en Kenia, donde la extracción de agua para el riego de las plantaciones redujo su flujo hasta en casi un 90%, en la estación seca. Por otra parte, el cerco de las áreas puede obstaculizar los corredores de migración, además de impedir que las cebras lleguen a los arroyos a beber agua.
-
- Enfermedades. La introducción de áreas de cría de ganado crea una competencia por el forrajeo, y expone a la cebra al contagio de enfermedades como la babesiosis y el ántrax. Recientemente en Kenia se registró un brote de ántrax, en el cual murieron más de 50 cebras. Esta afección es una potencial amenaza, especialmente para aquellas poblaciones pequeñas que están en riesgo de extinguirse.
- Cambio climático. Las comunidades de cebras están gravemente afectadas por los efectos del clima extremo y de la sequía que asolan las regiones donde habitan.
- Endogamia e hibridación. Actualmente, la mayor amenaza para la cebra de montaña (Equus zebra), es la pérdida de su diversidad genética, producida por la endogamia. De manera particular, esta especie habita en pequeñas poblaciones que impiden el intercambio genético, haciéndola más vulnerable a ciertas enfermedades. El principal problema de la especie que vive en Ciudad del Cabo es el riesgo de hibridación con la cebra de la llanura y con la cebra de montaña de Hartmann. Los investigadores atribuyen este cruce entre especies a la superposición de territorio. No obstante, señalan que también puede ser causado por el cercado que divide las áreas donde habitan, que los mantiene en contacto cercano durante todo el año.
- Acciones. Este ungulado africano se encuentra en numerosas áreas bajo la protección de organismos de carácter nacional e internacional. Algunos de estos refugios son el Parque Nacional Serengeti (Tanzania), el Parque Nacional Hwange (Zimbabwe), el Tsavo y Masái Mara (Kenia), el Parque Nacional Kruger (Sudáfrica) y el Parque Nacional Etosha (Namibia).
Reproducción de la cebra
Las cebras tienen dos tipos de sociedades diferentes. En una, propia de la cebra común y la de montaña, los machos y las hembras forman grupos familiares donde además están las crías y los jóvenes hasta los dos años. En este harén, la pareja vive junta durante años y la hembra se une a un macho en particular.
El otro tipo de sociedad, típico de las cebras de Grevy, las agrupaciones femeninas son de corta duración y las hembras frecuentemente deambulan entre los grupos sin machos. Así, la hembra puede aparearse con varios.
Para el macho, ambos sistemas son polígamos, ya que son activos reproductivamente y el dominante se puede reproducir con más de una hembra.
En la cebra común, la poliginia conlleva la defensa del harén, debido a la fuerte asociación que existe entre los miembros del grupo. Por el contrario, en las cebras de Grevy implica la protección de los recursos, ya que el macho defiende las zonas de pastoreo donde se encuentran las hembras.
Órganos reproductivos
La hembra tiene dos ovarios, que miden alrededor de 5 cm. Los óvulos producidos llegan al útero gracias a los oviductos, que se conectan con uno de los dos cuernos uterinos. El extremo caudal del útero, conocido como cuello uterino, ingresa a la vagina. Este órgano es elástico y mide entre 15 y 20 cm de largo.
La abertura exterior de la vagina se localiza de manera ventral al recto. En cuanto a las glándulas mamarias, la cebra tiene dos, cada una con dos conductos que tienen salida al exterior.
En el macho, los testículos están en el escroto, localizado entre la parte posterior del pene y los muslos. Desde cada testículo sale un conducto deferente, que se agranda al pasar por la vejiga, formando las ampollas. Estas se abren al comienzo de la uretra. Este órgano pasa alrededor de la sínfisis púbica hacia el pene, donde se encuentra protegida por el prepucio.
Proceso reproductivo
Las hembras maduran sexualmente antes que los machos, por lo que pueden tener su primera cría a los tres años, mientras que los machos se reproducen entre los cinco o seis años.
La cebra entra en celo en la temporada de lluvias, donde abundan las fuentes de alimentos. El estro puede durar un poco más de una semana. En cuanto a la gestación, suele durar entre 361 y 390 días.
Al momento del parto, la hembra se acuesta sobre su costado, poco tiempo después son expulsadas la cabeza y las patas anteriores de la cría. Seguidamente, sale el resto del cuerpo. En ese momento, el recién nacido intenta levantarse, rompiendo así el saco amniótico y el cordón umbilical.
Durante este proceso, el macho se mantiene cerca de la hembra, entre 10 y 50 metros. Al nacer, la cría pesa de 25 a 40 kilos y se une, junto a su madre, al grupo.
Alimentación de la cebra
Las cebras son animales herbívoros estrictos, que principalmente se alimentan de pastos fibrosos y duros. Algunas veces pueden ramonear y comer hierbas. Entre los preferidos está el Pennisetum schimperi, una especie herbácea poco aprovechada por el ganado y por otros ungulados.
También suelen consumir pastos de los géneros Chrysopogon, Enteropogon y Cenchrus. De estos comen sus hojas, tallos y los brotes tiernos.
Estos mamíferos pastan durante varias horas al día y para cortar la hierba utilizan sus fuertes dientes incisivos. Luego, la comida pasa a los dientes posteriores, que la trituran y muelen. El hecho de que mastiquen los alimentos por largo tiempo hace que los dientes se desgasten, por lo que crecen constantemente.
A medida que se acerca el período de sequía, la vegetación se va secando, y los rebaños se movilizan hacia otras regiones buscando pasto fresco y agua.
La disponibilidad de cuerpos de agua es una necesidad imperiosa para las cebras, sobre todo en la estación seca. Esta especie suele excavar pozos en cauces secos, para obtener agua subterránea. Una vez que encuentran la fuente de agua, la defienden de otros animales que intentan acceder a esta.
Digestión
La digestión de los alimentos ocurre en el ciego, donde las bacterias actúan degradando la celulosa. La digestión cecal de la cebra es menos eficiente en el procesamiento del pasto que la digestión de los rumiantes. Para compensar esto, ingiere más cantidad de alimento.
Comportamiento de la cebra
Las cebras se comunican entre sí utilizando sonidos y expresiones faciales. Utilizan vocalizaciones como el resoplido, el ladrido y el rebuzno. Por ejemplo, cuando detectan la presencia de un depredador, mantienen erguida sus orejas, la cabeza en alto y rebuznan fuertemente.
En cuanto a los gestos, pueden abrir ampliamente los ojos o mover sus labios, dejando sus dientes desnudos. Las orejas suelen representar su estado de ánimo. Cuando están asustadas, las empuja hacia adelante y si están enojadas, las tira hacia atrás.
Otro hábito muy frecuente en estos mamíferos africanos es el aseo mutuo, que realizan para fortalecer los lazos entre los miembros del grupo.
Los machos son muy territoriales. Marcan los límites de su área, para lo que generalmente utilizan sus heces. Si detectan la cercanía de un depredador, el líder alerta al grupo, vocalizando un agudo y fuerte resoplido.
El jefe del grupo se mantendrá en una posición firme, mientras el rebaño huye, desplazándose en zigzag. Si la situación se torna agresiva, puede pelear con el agresor. Para esto baja la cabeza, estira el cuello y deja sus dientes al descubierto. Si es necesario puede patear al otro, con tal fuerza que suele causarle graves lesiones.
Ventajas de las rayas de la cebra
Durante décadas, los investigadores han tratado de explicar el propósito del diseño de rayas blancas y negras en el cuerpo de las cebras. Esto ha originado diversas teorías, cada una con sus razonamientos propios.
Una de estas se refiere a que la finalidad del patrón de bandas es evitar que el animal sea infectado por la mosca del caballo. Este insecto puede transmitir diversos agentes patógenos a la cebra, ocasionando algunas enfermedades, como anaplasmosis y anemia infecciosa equina.
Según este planteamiento, dichas rayas crean una especie de ilusión óptica. Esta interrumpe el patrón de luz polarizada que se refleja desde las superficies oscuras, por las cuales sienten atracción las moscas. Así, por ejemplo, el pelaje de la cebra resulta menos atractivo que el tono liso del caballo.
En 2019 se realizó un estudio en Gran Bretaña, donde se demostró que las moscas del caballo atacaban con mayor frecuencia a los caballos que a las cebras, debido probablemente a la confusión que crea su diseño rayado.
Otros especialistas han sugerido que la ventaja de las bandas radica en que ayudan a camuflar a la cebra en su medio ambiente o a confundir a sus depredadores.
Estudios recientes
Un grupo de investigadores de la Universidad de California, en Los Ángeles, realizaron un estudio sobre la influencia de las variables ambientales en los patrones de franjas en las cebras comunes que habitan desde el centro hasta el sur de África.
El grupo plantea que estos ungulados necesitan un mecanismo de enfriamiento adicional, ya que su hábito alimenticio de comer por largas horas, los mantiene gran parte del tiempo bajo las altas temperaturas del clima africano.
Como producto de su investigación, identificaron que las cebras comunes que tenían las rayas dorsales más definidas habitaban en el norte de su rango, donde las temperaturas son más altas. Contrariamente, las que tenían las bandas menos definidas estaban al sur, donde la temperatura ambiental es más baja.
Sugirieron que probablemente este particular diseño tenga múltiples propósitos. Por ejemplo, las líneas de la espalda pueden contribuir con la termorregulación, mientras que las rayas de las patas pudieran ayudar a que las moscas del caballo no se posen en el animal.
Referencias
- Zebra. Recuperado de en.wikipedia.org..
- Zebra. Recuperado de britannica.com.
- Equus. Recuperado de itis.gov.t.
- Equus zebra. Recuperado de iucnredlist.org.
- Equus quagga. Recuperado de iucnredlist.org.