¿Qué es la educación socioemocional?
La educación socioemocional es el proceso mediante el cual una persona adquiere habilidades, creencias y competencias relacionadas con los aspectos sociales y sentimentales de su vida. Es un aspecto tradicionalmente ignorado en el ámbito educativo, pero al que se le ha empezado a dar más atención.
Antes, la educación formal se centraba principalmente en enseñar “habilidades duras”, es decir, las materias clásicas del conocimiento, como las matemáticas, el uso del lenguaje o la ciencia. En los últimos años, sin embargo, se ha descubierto que la educación socioemocional es crucial en prácticamente todos los ámbitos.
Teorías como la de las inteligencias múltiples o la inteligencia emocional han permitido que se ponga el foco en habilidades relacionadas con el autoconocimiento, la regulación de los sentimientos y las relaciones con los demás. Actualmente, se están desarrollando programas que permiten entrenar estas competencias de manera formal.
Los estudios relacionados con la educación socioemocional apuntan a que recibir entrenamiento en este sentido puede ayudar a que los alumnos tengan mayor confianza en sí mismos, sean capaces de plantearse metas y cumplirlas, sepan tomar mejores decisiones y, en general, relacionarse con otros y con su entorno de manera más efectiva.
Dimensiones de la educación socioemocional
Según la fundación Collaborative for Academic, Social, and Emotional Learning (CASEL), la educación socioemocional está compuesta por cinco competencias, que se retroalimentan y refuerzan entre sí: autoconciencia, autocontrol, conciencia social, habilidades interpersonales y toma de decisiones responsable.
- Autoconciencia. La autoconciencia es la capacidad de conocerse a sí mismo y descubrir las características propias más relevantes. Esto implica, por ejemplo, saber cuáles son los puntos fuertes y limitaciones, pero también tiene que ver con entender las emociones que se sienten en cada momento, las preferencias y los deseos. La autoconciencia es una parte fundamental de la educación socioemocional, ya que permite actuar de manera eficaz en distintos ámbitos al ayudar a escoger qué curso de acción tomar. También implica desarrollar una mayor autoestima y sentido del optimismo. Por último, se ha visto que las personas con una mayor autoconciencia normalmente tienen lo que se conoce como “mentalidad de crecimiento”. Al conocer el punto en el que se encuentran en cada momento, son más capaces de centrarse en su propio desarrollo y de avanzar hasta conseguir aquello que desean.
- Autocontrol. Es la capacidad de regular los propios estados emocionales con el objetivo de actuar de la forma deseada y evitar el sufrimiento innecesario. Así, las personas con mayor autocontrol son capaces de gestionar sus niveles de estrés, actuar a pesar de no estar motivadas, trabajar para cumplir las metas que se han propuesto, desarrollar hábitos y controlar sus impulsos.
- Conciencia social. La conciencia social engloba muchas características y capacidades relacionadas con la empatía. Se trata, por tanto, de la habilidad de entender los puntos de vista de otras personas, y sus emociones. Sin embargo, el concepto de conciencia social va más allá, al incluir también la capacidad de comprender las perspectivas de individuos con experiencias muy diferentes, incluyendo a quienes provienen de otros países, culturas o grupos. Esto es especialmente importante en la actualidad, y los niveles de migración que hay en el mundo.
- Habilidades interpersonales. Las habilidades interpersonales permiten desarrollar relaciones con otros individuos de forma efectiva y satisfactoria. También son necesarias para desenvolverse correctamente en entornos donde sea necesario interactuar con más personas. En esta categoría hay una gran cantidad de capacidades distintas, relacionadas con ámbitos como la comunicación, el trabajo en equipo y la resolución de conflictos, pero también las que tienen que ver con la gestión de las expectativas sociales, la colaboración y la asertividad.
- Toma de decisiones responsable. La última dimensión que se entrena con la educación socioemocional es la toma de decisiones. Por la complejidad del mundo moderno, cada vez es más necesario contar con herramientas que aseguren escoger el camino correcto basándose en estándares éticos, valores personales y pensamiento a largo plazo. Así, una persona con verdadera capacidad para tomar decisiones de manera responsable tiene que darse cuenta no solo de las consecuencias que aquello que elija tendrá a corto plazo, sino también de lo que puede ocurrir a partir de su elección en el futuro. También debe ser capaz de establecer estándares de comportamiento para sí misma, basados en lo que cree que es correcto y lo que es aceptable socialmente.
Importancia de la educación socioemocional
Hasta hace relativamente poco tiempo, las habilidades socioemocionales no estaban bien valoradas en el ámbito académico. Se consideraba que era responsabilidad de las familias y de instituciones, como las religiones organizadas, educar a los niños y jóvenes en ámbitos como la ética, la gestión emocional y las habilidades sociales.
Sin embargo, los rápidos cambios que ha sufrido la sociedad en las últimas décadas y ciertos desafíos, como la pérdida de estabilidad por factores como la automatización de los trabajos y la fluidez de las relaciones modernas, ha hecho que la educación socioemocional se haya vuelto muy necesaria para desenvolverse en el entorno actual.
Así, los estudios realizados al respecto apuntan a que tener un buen nivel de habilidades socioemocionales puede ayudar a las personas a conseguir sus metas, estar más satisfechas con su situación vital, tener relaciones más satisfactorias y mejorar su autoestima. Al mismo tiempo, también protege de problemas psicológicos, soledad, estrés y frustraciones de todo tipo.
Por ello, cada vez más países están incluyendo ciertos aspectos de la educación socioemocional en sus aulas, con el objetivo de preparar a sus jóvenes para los desafíos de la vida moderna. Sin embargo, aún queda mucho por hacer, ya que el sistema educativo formal todavía no se adapta a las nuevas necesidades del siglo actual.
Educación socioemocional en preescolar
La educación en habilidades socioemocionales implica trabajar sobre aspectos complejos, como el autoconocimiento y la gestión de las emociones. Por eso, es habitual que empiece a hablarse de estos temas cuando los alumnos alcanzan una cierta edad, normalmente ya en la adolescencia.
Sin embargo, en los primeros años de la educación formal es posible fomentar la adquisición de habilidades socioemocionales en los alumnos. A diferencia de lo que ocurre más adelante, generalmente en preescolar y en la escuela primaria, esto se hace mediante ejercicios prácticos, que pueden desarrollar los cinco ámbitos de manera indirecta.
La clave para desarrollar habilidades socioemocionales en niños pequeños es hacerlo desde un plano concreto, relacionando cada uno de los ámbitos que se quiere trabajar con la experiencia directa de los alumnos.
Por ejemplo, si se quiere fomentar la empatía, normalmente se realizan ejercicios que obliguen a los niños a ponerse directamente en el lugar de otra persona.
Además, también es posible trabajar la educación socioemocional a través de historias, ejemplos concretos y recursos como películas o cuentos. En cualquier caso, lo más importante en esta etapa educativa es darse cuenta de que los niños ya son capaces de aprender a manejarse en el mundo, a pesar de que no lo hagan de la misma forma que los adultos.
Educación socioemocional en secundaria
A partir de la adolescencia, cuando los jóvenes alcanzan la “etapa de las operaciones formales”, es posible hacer más explícito el aprendizaje de las habilidades socioemocionales. En este punto, los alumnos pueden reflexionar como lo haría un adulto, ya que sus capacidades mentales están desarrolladas de forma casi plena.
Tanto en secundaria como en bachillerato, hace tiempo que se introdujeron algunas asignaturas que buscaban trabajar las habilidades socioemocionales de forma directa. Este es el caso, por ejemplo, de materias como ética, educación para la ciudadanía o filosofía.
Sin embargo, incluso en este punto es necesario que los profesores sean capaces de relacionar lo que se quiere transmitir con la experiencia personal de los alumnos.
Así, en lugar de hablar de manera abstracta de conceptos como la ética, la empatía o la asertividad, se ha demostrado que es mucho más útil para los jóvenes utilizar ejemplos concretos y prácticos, que les hagan reflexionar sobre su propia vida.
Por otra parte, la educación socioemocional es especialmente importante en esta etapa de la vida de los alumnos. Esto se debe a que durante la adolescencia los jóvenes sufren muchos cambios que generalmente no saben cómo afrontar, y, por lo tanto, están expuestos a muchos riesgos y problemas que pueden tener consecuencias muy graves en su vida adulta.
A pesar de que se han logrado muchos avances en la enseñanza de habilidades socioemocionales, todavía es necesario desarrollar nuevos métodos para trabajar sobre ellas e implementarlos tanto en la familia como en la educación formal.
Referencias
- What is SEL. Recuperado de casel.org.
- What is social – emotional learning? Recuperado de cfchildren.org.
- Social emotional learning. Recuperado de secondstep.org.
- Why We Really Need SEL (Social-Emotional Learning) Now. Recuperado de education.cu-portland.edu.
- Aprendizaje socioemocional: lo que necesita saber. Recuperado de understood.org.