¿Qué es el vinagrillo?
El vinagrillo, conocido como uropigio, es un grupo de animales arácnidos que pertenecen al orden Uropygi, y que se caracterizan principalmente por tener un flagelo en el extremo terminal de su prosoma, además de unas glándulas anales secretoras de un líquido similar al vinagre.
Presentan un aspecto temible, pero, en general, son totalmente inofensivos. Se cree, de acuerdo a los registros fósiles recolectados, que se originaron en la era Paleozoica, específicamente en el período Carbonífero, y abarcan más de 280 especies.
Características del vinagrillo
– Patas. Tienen ocho patas, como la mayoría de los arácnidos, pero dos de ellas se han modificado y alargado para formar estructuras que parecen látigos o colas, de ahí el otro nombre común, “escorpiones látigo”. Son los pedipalpos, y son mucho más largos que las otras patas.
– Cola. Aunque los uropigios presentan cola, no tienen un aguijón venenoso, como los escorpiones verdaderos. La cola se utiliza principalmente para la locomoción y el equilibrio.
– Alimentación. Son depredadores y se alimentan de insectos y otros pequeños invertebrados. Utilizan sus pedipalpos para capturar y sujetar a sus presas.
– Glándulas. Uno de los elementos más distintivos es que los machos tienen unas glándulas a nivel del segmento terminal del prosoma que desembocan a ambos lados del ano. Esas glándulas no tienen veneno, sino que sintetizan una sustancia de elevado contenido de ácido acético y, por eso, huele a vinagre. Esta sustancia es inocua para el ser humano, pero la picadura del animal resulta dolorosa.
Taxonomía del vinagrillo
- Dominio: Eukarya.
- Reino: Animalia.
- Filo: Arthropoda.
- Subfilo: Chelicerata.
- Clase: Arachnida.
- Superorden: Tetrapulmonada.
- Orden: Uropygi.
Morfología del vinagrillo
Como los arácnidos, los uropigios tienen un cuerpo dividido en dos segmentos o tagmas: el cefalotórax (o prosoma) y el abdomen (opistosoma). Pueden medir entre 2 hasta 15 cm.
El elemento característico de los uropigios es el flagelo ubicado en el extremo posterior de su cuerpo. Este es aplanado en sentido dorso ventral, y típicamente de color castaño rojizo oscuro.
- Prosoma. Es el segmento anterior del animal. Está cubierto por una especie de caparazón o cutícula resistente que sirve como escudo protector al uropigio. En la superficie dorsal del prosoma se localizan los órganos de la vista, con un par de ojos simples. La porción ventral del prosoma está ocupada en su totalidad por el primer artejo (coxa) de las patas. Aquí se originan los apéndices articulados del animal: dos quelíceros, dos pedipalpos y ocho patas.
- Quelíceros. Son el primer par de apéndices articulados. Están conformados por dos artejos y son reducidos. El artejo proximal tiene una forma de tallo, en tanto que el artejo distal tiene forma de uña.
- Pedipalpos. Están ampliamente desarrollados. Tienen una terminación en forma de pinza, y una serie de protuberancias muy notorias, que les sirven para capturar las presas y triturarlas. Las pinzas se conforman por un dedo móvil y uno fijo. Es importante destacar que en el artejo que corresponde a la patela se aprecia otra protuberancia que, de manera general, constituye otra pinza. En este sentido, los pedipalpos de los uropigios son los más prominentes y desarrollados de todos los arácnidos.
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- Patas. Son ocho y se distribuyen en pares. Su contextura es delgada y de apariencia frágil, especialmente el primer par. Más que función locomotora, ese primer par tiene función sensorial, ya que le suministra información sobre el medio donde se encuentra. Los tres pares restantes cumplen la función de locomoción.
- Opistosoma. Es la parte más larga del animal. Se encuentra unida al prosoma mediante una estructura denominada pedicelo. De acuerdo a algunos especialistas, el opistosoma está dividido en dos áreas o zonas: el mesosoma y el metasoma.
- Mesosoma. El mesosoma tiene una ubicación anterior y abarca nueve de los doce segmentos del opistosoma. Aquí están localizados los agujeros correspondientes al aparato reproductor (en el segundo segmento), y los espiráculos del sistema respiratorio (posición lateral).
- Metasoma. El metasoma abarca los tres últimos segmentos del opistosoma. En su segmento terminal se encuentra el orificio anal. A ambos lados de este, se ubican los orificios de las glándulas anales. A nivel lateral y dorsal de ese último segmento es posible observar unas pequeñas manchas de color pálido (omatoides). Su función no ha sido demostrada, pero se utilizan para diferenciar una especie de otra. Del extremo posterior del metasoma se desprende una estructura flagelar larga y delgada, multiarticulada. La función de esta estructura tiene que ver con el lanzamiento de la sustancia secretada por las glándulas anales. Además de ser un elemento característico distintivo de los uropigios.
- Anatomía interna
- Sistema digestivo. Los uropigios tienen un sistema digestivo completo. Está conformado por una zona inicial, conocida como estomodeo y que se corresponde con el orificio, la cavidad bucal y el esófago. Seguidamente, se continúa con el mesodeo, o intestino medio, y finalmente el proctodeo, que culmina con el orificio anal. El sistema digestivo de este animal también cuenta con un órgano anexo, el hepatopáncreas, que tiene que ver con el almacenamiento de nutrientes.
- Sistema excretor. Es similar al de otros arácnidos. Está conformado por los llamados tubos de Malpighi y también por nefrocitos, encargados de recolectar los desechos. Los tubos de Malpighi desembocan en el proctodeo. Por otra parte, las glándulas coxales también forman parte del sistema excretor. Deben su nombre a que desembocan justo a nivel del primer artejo (coxa) del último par de patas.
- Sistema nervioso. Conformado por acúmulos nerviosos que constituyen los ganglios, se distribuyen por todo el cuerpo. Principalmente asociados a los órganos del sistema digestivo como el esófago. Presentan un ganglio a nivel del prosoma, el cual cumple, en cierta medida, las funciones de un cerebro primitivo. Emite fibras nerviosas hacia los ojos simples del animal, y hacia el resto de los ganglios del cuerpo.
- Sistema respiratorio. Los uropigios presentan un sistema respiratorio constituido por dos tipos de estructuras: tráqueas y pulmones en libro. Las tráqueas son un conjunto de conductos que se ramifican hacia el interior del animal en otros más pequeños, llamados traqueolas. Estos no llegan directamente a las células del animal, como ocurre en otros artrópodos, sino que desembocan en unos órganos especializados en el intercambio gaseoso: los pulmones en libro. Estos están conformados por una serie de laminillas, apiladas unas sobre otras, que se asemejan a las páginas de un libro. Y allí se realiza el intercambio gaseoso. Las tráqueas se comunican con el exterior mediante los espiráculos que se abren hacia la porción lateral del opistosoma.
Hábitat y distribución del vinagrillo
Los uropigios viven principalmente en ecosistemas donde abunda la humedad, como los ubicados en las zonas tropicales o subtropicales. Prefieren los lugares húmedos y oscuros, por lo que normalmente se localizan debajo de rocas, en cuevas o enterrados en el suelo.
Aunque no se han descrito especies que habiten en ambientes desérticos, hay algunas que viven en ecosistemas donde hay poca humedad, pero no tan extrema como en un desierto.
Alimentación del vinagrillo
Estos animales son carnívoros. Se alimentan de pequeñas presas, como insectos, anfibios e incluso de otros arácnidos, entre los que se cuentan alacranes y arañas. En el proceso de captura emplean sus robustos pedipalpos.
Como no son capaces de ingerir en su totalidad a la presa, segregan enzimas digestivas que realizan una predigestión del alimento, convirtiéndolo en una especie de papilla. El animal ingiere esa papilla y se degrada aún más gracias a la acción de las enzimas. Posteriormente, en el mesodeo se realiza la absorción de los nutrientes, y finalmente los productos de desecho son liberados por el ano.
Reproducción del vinagrillo
La reproducción es sexual, de fecundación interna. Son ovíparos e involucran un desarrollo directo. En este sentido, la reproducción sexual implica la fusión de gametos sexuales masculinos y femeninos. Pero para que ocurra la unión de esos gametos, no es necesaria la cópula.
El macho libera una estructura conocida como espermatóforo, que contiene los espermatozoides. Luego, la hembra lo recoge y se lo introduce, ocurriendo de esta manera la fecundación. Posteriormente, la hembra pone los huevos en un sitio excavado por ella en el terreno.
Una vez transcurre el tiempo requerido, de los huevos eclosionan las crías, las cuales se fijan al abdomen de la madre hasta que experimentan la primera muda. Finalmente, se despegan y subsisten por sí solas. A lo largo de su vida experimentarán tres mudas más, tras las cuales alcanzan la madurez.
Referencias
- Brusca, R. C. & Brusca, G. J., Invertebrados, 2ª edición. McGraw Hill.
- Curtis, H., Barnes, S., Schneck, A. y Massarini, A. Biología. Editorial Médica Panamericana. 7° edición.
- Hickman, C. P., Roberts, L. S., Larson, A., Ober, W. C., & Garrison, C. Integrated principles of zoology. McGraw Hill.
- Sendra, A. y Reboleira, A. The world’s deepest subterranean community – Krubera-Voronja Cave (Western Caucasus). International Journal of Speleology.
- Zumbado, M. y Azofeifa, D. Insectos de importancia agrícola. Guía básica de Entomología. Programa Nacional de Agricultura Orgánica (PNAO).